El fútbol sudamericano está de luto. Este miércoles 8 de octubre de 2025, falleció Miguel Ángel Russo a los 69 años de edad, víctima de una prolongada batalla contra el cáncer de vejiga y próstata.
La noticia fue confirmada por medios argentinos y el Club Atlético Boca Juniors, institución con la que conquistó la Copa Libertadores 2007 y dejó una huella imborrable.
Su partida ha generado múltiples homenajes en redes sociales, donde exjugadores, periodistas y clubes han recordado su legado con mensajes de respeto y gratitud.
Su paso por la Liga MX

Russo dirigió en México al Monarcas Morelia, equipo al que llegó para el torneo Invierno 2001 como relevo de Luis Fernando Tena.
Su etapa fue breve: se mantuvo hasta la jornada 7 del Verano 2002, acumulando 14 partidos oficiales entre Liga y Copa Libertadores. El saldo fue de 4 victorias, 4 empates y 6 derrotas, sin lograr consolidar su proyecto en el fútbol mexicano.
Durante su gestión, Morelia disputó la fase de grupos de la Libertadores 2002, enfrentando a equipos como Vélez Sarsfield y Nacional de Uruguay.
Aunque no logró avanzar, el equipo mostró momentos competitivos bajo su dirección. Tras su salida, el club fue tomado por Rubén Omar Romano. Su paso por México fue discreto, pero formó parte de una generación de técnicos argentinos que incursionaron en la Liga MX a inicios de los 2000.
Legado internacional
Más allá de México, Russo construyó una carrera sólida en Sudamérica. Fue campeón con Boca Juniors, Millonarios de Colombia, Vélez Sarsfield, Rosario Central, San Lorenzo, Estudiantes de La Plata y Alianza Lima, entre otros.

Su estilo de juego, carácter sereno y capacidad para gestionar grupos lo convirtieron en un referente del banquillo argentino.
En Colombia, dejó huella con Millonarios, donde ganó la liga en 2017 y fue reconocido por su liderazgo. En Perú, fue campeón con Alianza Lima en 2021.
También tuvo ciclos destacados en Racing Club, Lanús y Central Córdoba, siempre con sello táctico y respeto institucional.
Diversos clubes y figuras del fútbol han expresado condolencias, destacando su calidad humana, profesionalismo y legado formativo.
Russo no solo fue un técnico exitoso, sino también un formador de talentos y un símbolo de resiliencia, tras superar una primera etapa de cáncer en 2020.
Su partida deja un vacío en el fútbol latinoamericano, pero también una trayectoria que será recordada por títulos, valores y respeto dentro y fuera de la cancha.