
El coordinador nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Romero, inició formalmente la conversación interna sobre la candidatura presidencial rumbo a 2030 al incluir a Kenia López Rabadán, presidenta de la Cámara de Diputados, entre los perfiles con potencial para encabezar al partido en la próxima contienda federal.
Durante un mensaje público, el dirigente afirmó que Acción Nacional cuenta con “muchísimas fichas” para competir y que López Rabadán es parte central del abanico político que el panismo pretende fortalecer en los próximos años.
Romero destacó que el partido buscará construir una candidatura competitiva a partir de perfiles con trayectoria legislativa, de gobierno y de representación territorial.

En su lista colocó a gobernadoras, gobernadores, coordinadores parlamentarios y figuras de la dirigencia.
Gobernadores panistas: la primera línea de fuerza territorial
En su mención, el líder panista subrayó particularmente a los mandatarios estatales en funciones, a quienes calificó como pilares políticos del partido.
Hoy Acción Nacional gobierna Chihuahua, Querétaro, Aguascalientes y Guanajuato, entidades consideradas históricamente estratégicas para el panismo.
- María Eugenia Campos Galván, gobernadora de Chihuahua.
- Mauricio Kuri González, gobernador de Querétaro.
- Libia Dennise García Muñoz Ledo, gobernadora de Guanajuato.
- María Teresa Jiménez Esquivel, gobernadora de Aguascalientes.

Romero señaló que estos gobiernos representan ejemplos de gestión que el partido pretende proyectar hacia 2030, en un contexto donde el PAN intenta reconstruir su presencia territorial después de ciclos electorales adversos.
Alcaldías, Senado y Cámara de Diputados: el andamiaje institucional del PAN
El dirigente panista también destacó la presencia del partido en gobiernos locales, particularmente en la Ciudad de México, donde Acción Nacional encabeza seis alcaldías: Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Miguel Hidalgo y Tlalpan.
Actualmente, el PAN cuenta con 71 diputaciones federales: 31 por mayoría relativa y 40 por representación proporcional.

En el Senado mantiene 21 escaños, lo que lo posiciona como una de las principales fuerzas opositoras dentro del Congreso de la Unión.
Estas posiciones, afirmó Romero, forman parte de la estructura que el partido quiere consolidar antes de definir a su aspirante presidencial.
Una década de retrocesos: del dominio estatal a la caída electoral
A la par de su reorganización interna, el PAN enfrenta el reto de remontar una larga fase de pérdida de votos iniciada después de los gobiernos federales de Vicente Fox y Felipe Calderón.
La elección presidencial de 2012 representó un punto de inflexión: Josefina Vázquez Mota llegó debilitada por divisiones internas y terminó con 25.41% de la votación nacional, su peor desempeño en casi dos décadas.

Aunque el partido logró recuperaciones parciales en procesos estatales de 2013, 2015 y 2016 —incluyendo retener Baja California, recuperar Querétaro y ganar Chihuahua, Tamaulipas, Durango, Quintana Roo y Veracruz—, su desgaste volvió a evidenciarse en 2018.
Ese año, Ricardo Anaya obtuvo solo 22.2% de los votos, otro resultado históricamente bajo para el panismo.
Principales hitos del declive panista
- Pérdida de estados emblemáticos donde había ganado holgadamente en 2006.
- Fracturas internas en procesos presidenciales, especialmente en 2012.
- Retroceso al tercer lugar en ciudades y entidades donde era competitivo.
- Resultados presidenciales a la baja en 2012 y 2018.

