
El precio del kilo de tortilla ya alcanza y supera los 30 pesos en diversos estados del país, reveló la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), al advertir una nueva escalada de precios en productos de consumo básico como el pan, el chocolate, el azúcar, el café y las bebidas azucaradas.
De acuerdo con Cuauhtémoc Rivera, presidente de la ANPEC, factores como los problemas en el campo, el encarecimiento global de insumos, así como la aprobación de nuevos impuestos a las bebidas saborizadas, han impulsado el incremento de precios desde diciembre, tendencia que se mantendrá durante enero y a lo largo de 2026.
“En distintos estados ya se registran precios de la tortilla por encima de los 30 pesos por kilo y se prevé que en enero suban más por los mayores costos de producción”, explicó Rivera. Entre los estados donde ya se reportan los precios más altos se encuentran Baja California Sur con 32 pesos, Sonora con 34 pesos, así como Colima, Guerrero y Veracruz, donde el promedio ronda los 30 pesos por kilo.
La situación se agrava por la reciente aprobación en el Congreso del incremento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a las bebidas saborizadas, que pasará de 1.64 a 3.08 pesos por litro, lo que impactará directamente en el precio final de refrescos y bebidas con edulcorantes a partir de enero.
Además del alza en la tortilla y los refrescos, la ANPEC alertó que otros productos de consumo cotidiano también han sufrido incrementos importantes. Por ejemplo, el café ha subido por factores estacionales, mientras que la inestabilidad en el precio del azúcar y el encarecimiento global del cacao han afectado directamente a la confitería, chocolatería y hasta al pan dulce.

En un mensaje difundido a través de redes sociales, la asociación calificó este fenómeno como una “nueva escalada de precios impulsada por la cuesta de enero y el aumento de impuestos”. Asimismo, señaló que durante la primera mitad de noviembre la inflación registró un alza anual de 3.61%, cifra a la que se suman factores como la inseguridad en las carreteras y la extorsión, que encarecen la distribución de mercancías.
Cuauhtémoc Rivera advirtió que la presión inflacionaria para 2026 es preocupante, debido a la desaceleración económica, la salida de capitales a países como España y el freno a la inversión extranjera, provocado —según dijo— por la percepción de inseguridad en México.
“La percepción que se tiene de México en el extranjero es negativa; nos ven como un país violento, sin certidumbre jurídica ni reglas claras para la inversión, lo que provoca un crecimiento marginal que nos coloca en los últimos lugares de América Latina, solo por encima de Haití y Venezuela”, sostuvo.
El dirigente de la ANPEC también alertó que la renegociación del T-MEC en 2026 podría ser compleja, especialmente por los temas de energía, seguridad y migración, los cuales —afirmó— Estados Unidos pondrá en la mesa.
Ante este panorama, la asociación pidió al gobierno federal corregir el rumbo antes de que la situación empeore, pues el impacto directo de estos aumentos se refleja en el bolsillo de millones de familias mexicanas, que enfrentan mayores dificultades para adquirir productos básicos.


