
El cantante Gerardo Ortiz reapareció ante la prensa tras ser sentenciado en Estados Unidos a tres años de libertad supervisada por su relación con transacciones vinculadas al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Tras salir de su audiencia y sin poder escapar del asedio de la prensa, Gerardo Ortiz se detuvo ante reporteros para responder sobre su situación personal y profesional tras haber ido a juicio.
Primero se dirigió a sus fans, a quienes pidió una disculpa, a la vez que adelantó que ya prepara el comienzo de un nuevo capítulo en su carrera musical: “Antes que nada, ofrecerle unas disculpas a mi público por todo esto que se ha pasado. Estoy contento porque mañana sale mi nueva producción, ‘El Ejemplar’, a las cinco de la tarde. Esperamos seguir adelante”, precisó.

El intérprete de “Tal como eres” se refirió también a cantidad de versiones y rumores que circularon sobre su figura, en especial durante el proceso legal y las investigaciones sobre su presunta relación con el CJNG, al respecto señaló: “Se han dicho demasiadas cosas, demasiadas mentiras”.
Ortiz evitó profundizar en los detalles del proceso judicial y de señalar cuáles eran dichas mentiras. El artista reiteró que “hay una verdad” sobre lo sucedido y aclaró:
“Nosotros estuvimos por allá cantando en ese evento; todos lo vieron en YouTube, vieron fotos. Los fans que estuvieron presentes ese día ahí, era imposible decir que no. Ese show se hizo; estuvimos ahí en Aguascalientes y eso es todo. No tengo nada más que decir. ¿Hubo mentiras? Se han dicho muchas cosas, mas esa es la verdad. Nosotros estuvimos ahí cantando en este concierto, estuvimos ahí presentes, compartiéndoles un poco de nuestra música al público", subrayó.
Una sentencia condicionada a la colaboración

De acuerdo con información del periodista Ángel Hernández, presente en la audiencia, el artista ha reiterado que no tiene vínculos con el narcotráfico, ni ha cometido delitos relacionados con tráfico de drogas, explicando que su colaboración con el FBI estuvo limitada exclusivamente a este caso.
El periodista de Milenio también ha señalado que Ortiz enfrenta un momento difícil para agendar conciertos en México, ya que su condición de colaborador de las autoridades estadounidenses y testigo clave complicó su situación personal y familiar. Además, el propio cantante admitió su temor ante la exposición pública de su cooperación con la justicia, en particular tras la muerte de Jesús Pérez Alvear, señalado en la trama judicial y asesinado a fines del año pasado.
Gerardo Ortiz libró pasar tiempo en prisión luego de que la jueza Maame Ewusi Frimpong le permitiera una condena de libertad supervisada durante tres años. Asimismo, deberá pagar una multa económica aún por definir, pero que podría oscilar entre 250 mil y 1.5 millones de dólares.

La jueza fundamentó su decisión tanto en los antecedentes del músico como en su papel determinante para la condena de José Ángel del Villar, exmánager de Ortiz.
Durante la audiencia, los representantes legales explicaron que Ortiz accedió a realizar presentaciones con empresas vinculadas al CJNG porque se encontraba bajo el control de Del Villar, quien ya fue condenado a cuatro años de prisión tras haber sido hallado culpable.
El acuerdo de culpabilidad permitió al cantante evitar la prisión, aunque le exige abstenerse de viajar fuera de Estados Unidos, no consumir sustancias ilegales y aceptar inspecciones en sus domicilios si así se determina.
La jueza reconoció la “valentía” de Ortiz al colaborar, pero le advirtió sobre los riesgos y restricciones del nuevo escenario legal. “Recuerdo su testimonio durante el juicio, admiro su valentía. Ahora, el camino adelante no será fácil”, pronunció.
Acusaciones, antecedentes y consecuencias

Las investigaciones apuntaron que los conciertos donde participó Gerardo Ortiz ocurrieron bajo el control de Del Records, la firma musical gestionada por Ángel Del Villar. Las autoridades estadounidenses vincularon tanto a la empresa como a varias personas de su entorno –incluido el asesinado Jesús Pérez Alvear y el financiero Luca Scalisi– con operaciones financieras del CJNG.
El músico fue procesado en un expediente independiente y colaboró con pruebas clave para el caso principal. Aunque aceptó cargos equivalentes a los de sus exsocios, la colaboración facilitó la imposición de una sentencia menos severa.
El cantante, nacido en Pasadena, California, y criado en Culiacán, Sinaloa, ha sido una figura relevante en música regional y narcocorridos, lo que incrementó la cobertura e interés sobre su proceso legal.


