El debate sobre el presunto fraude que hubo en La Casa de los Famosos México 2025 ha revivido luego de que recientes declaraciones del periodista de espectáculos Gerardo Escareño, conocido como Vaya Vaya, encendieran nuevamente la polémica al asegurar que fuentes “muy allegadas a Televisa” confirmaron que la salida de Aarón Mercury fue resultado de una decisión estratégica de la producción y no del voto del público.
Durante una transmisión en vivo realizada el 16 de noviembre, Escareño afirmó: “Ese día de Aarón Mercury se iba Shiky. Se iba Shiky, señoras. Pero ese cambio estratégico que dio mucho de qué hablar y logró el objetivo la casa: que diera de qué hablar”, confesó.
El periodista sostuvo que sus encuestas digitales —realizadas principalmente en Facebook entre audiencias afines a los realities— tuvieron una alta coincidencia con los resultados oficiales de otras galas, pero que en este caso mostraban a Shiky como el participante con menos apoyo frente al influencer.
La eliminación no solo desconcertó a la audiencia, participantes y hasta conductores; sino que además generó una cadena de reacciones que marcaron uno de los momentos más discutidos de la temporada.
Gerardo Escareño relató que fuentes confiables dentro de Televisa le transmitieron que la sorpresiva eliminación de Mercury respondió a la necesidad de crear un “cambio estratégico” que generara conversación y levantara el rating del programa, que estaba comenzando a caer.
Según el periodista, “La Casa necesitaba que le levantaran el evento” y esa habría sido la lógica detrás del cambio de último momento, al margen de la tendencia de votos reales.
¿Qué pasó ese día?
Ese 28 de septiembre la sorpresa cedió paso a la indignación apenas se supo el resultado que confirmaba la eliminación del integrante de cuarto Noche. La familia de Aarón Mercury, presente en el estudio, reaccionó con gritos y lágrimas al conocer la eliminación.
En minutos, miles de usuarios en redes sociales se organizaron bajo hashtags y publicaron hilos y videos en los que compartían supuestas pruebas de manipulación. La palabra “fraude” se posicionó como tendencia junto al nombre del eliminado, mientras seguidores exigían explicaciones a la producción.
El debate se intensificó por el papel de Shiky, quien quedó en la mira del público al beneficiarse indirectamente de la decisión. Ese día, tras la gala, Shiky ofreció una disculpa ante las cámaras de la casa por permanecer en competencia al sentirse culpable.
Otro foco de inquietud para las audiencias fueron las ediciones previas al reality: seguidores de Mercury denunciaron que durante la semana anterior, el programa mostró con menor frecuencia al tiktoker en pantalla, mientras que a otros nominados —en especial a Shiky— se les permitió un desarrollo más favorable de su historia.
Además, varias voces en redes señalaron que la dinámica de nominación previa en que Shiky asignó puntos habría estado influenciada o guiada por la producción, reforzando la idea de trato preferencial y narrativa dirigida al interés del show.
El día de la votación, la conductora Galilea Montijo advirtió que “las votaciones estaban muy cerradas” y llamó a no confiarse. Esa declaración, sumada al clima previo en la gala, elevó las sospechas y la sensación de desconcierto.
Después, mientras en redes sociales la controversia sumaba fuerza, Aarón Mercury recurrió a sus plataformas para llamar a la calma y negar que hubiera existido fraude. Pese a este intento de apaciguar los ánimos, gran parte de la comunidad digital ya había dado la discusión por iniciada y mantuvo la presión sobre la producción y la cadena, pues incluso su familia hizo comentarios advirtiendo que había algo raro detrás de la decisión.
