
Gerardo Moya, conocido en redes sociales como El Jerry, publicó dos historias breves minutos previas a ser asesinado junto a su acompañante Gustavo “N” en el sector Tres Ríos de Culiacán, Sinaloa.
La breve secuencia transmitida desde el interior de una camioneta de lujo en la que más tarde perderían la vida dejó ver parte de la rutina de ambos hombres que precedió al ataque a balazos ocurrido la tarde del domingo 16 de noviembre.
Fue a través de su cuenta de Instagram, plataforma en la que el joven influencer acumulaba 7.175 seguidores, en donde compartió dos historias.
En el primer video, que tiene una duración de 20 segundos, se observa a El Jerry y a su acompañante Gustavo sentados dentro de una camioneta GMC Sierra color gris, ambos vestidos de forma casual y con gorras. En el área central del vehículo, sobresalen al menos dos latas de cerveza. La cámara enfoca también el tablero, donde se aprecia la pantalla del sistema de audio reproduciendo la canción “Cristina”, interpretada por Edición Especial.
La letra de la canción elegida contiene referencias explícitas al narcotráfico y menciona actividades y personajes ligados a ese entorno: “Soy mafioso fui importante, valorado entre los grandes, me tocó ver toneladas, aviones repletos de droga cruzaba a la unión americana (…)”, se escucha.
El segundo video subido por El Jerry en historias de Instagram estuvo disponible para sus seguidores pocos minutos después del primero y dura 10 segundos.
En esa grabación, el plano se mantiene al interior de la camioneta y muestra a Gustavo N, el copiloto, revisando su celular mientras entre los asientos aún se distinguen varias latas de cerveza abiertas. De fondo, suena el corrido “Entre Pancho y Pancho”, interpretado por Arley Pérez, una pieza musical con referencias directas a Los Ántrax, brazo de la Mayiza del Cártel de Sinaloa.
El corrido incluye versos como “Yo soy Pancho Arce, estoy para servirles, siempre y cuando ande franco yo en la empresa, porque es un honor para mí ser del virus que ataca a quien quiera hacer daño a MZ (…) Los antrax nos llaman y nos apodamos, el 5 y el 2 andan muy alterados”, se escuchaba.
En TikTok, donde superaba los 11.400 seguidores y 905.200 “me gusta”, El Jerry compartía videos en los que exhibía su vida cotidiana, consumo de bebidas alcohólicas, autos, interacciones con amigos y un ambiente ligado a la cultura del lujo. Destaca el uso recurrente de textos superpuestos, frases breves y música de narcocorridos.
En su cuenta de Instagram, Gerardo Moya mantenía sólo una publicación visible, donde se le observa posando en un sofá de un ambiente moderno y privado. Sin embargo, tenía una cuenta alterna, privada, en donde mostraba material gráfico más relevante: él posando con armas largas.
¿Cómo fue el ataque?

El ataque en el que fue asesinado Gerardo Moya, conocido como “El Jerry”, ocurrió momentos después en el sector Tres Ríos de Culiacán, Sinaloa.
De acuerdo con reportes de Noroeste, Los Noticieristas y Quadratin, el hecho sucedió alrededor de las 17:00 horas, cuando El Jerry y su acompañante, identificado como Gustavo “N”, salieron de un autolavado a bordo de una camioneta GMC Sierra de modelo reciente y color gris.
En ese momento, al menos cuatro personas armadas que viajaban en un vehículo Jetta interceptaron la camioneta sobre el bulevar Enrique Sánchez Alonso, exactamente en el cruce con la calle José Ortiz de Domínguez, a escasos 250 metros de las oficinas de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa (FGE). Los atacantes abrieron fuego con armas largas, desatando múltiples ráfagas contra la unidad en movimiento.

El ataque fue tan intenso que provocó escenas de pánico en una plaza comercial cercana: numerosas personas buscaron resguardo y se lanzaron al suelo al escuchar las detonaciones. Vecinos de las colonias cercanas y testigos presenciales alertaron de inmediato al 911.
La camioneta, bajo el fuego de los agresores, recibió impactos de bala en la carrocería y los cristales. Tras el tiroteo, quedó detenida en medio del bulevar, con el motor encendido, la caja de cambios en drive y las luces prendidas. El conductor y el copiloto fallecieron casi de inmediato a consecuencia de las heridas producidas por disparos en la cabeza y en zonas vitales del cuerpo.
Pocos minutos después del ataque, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), así como uniformados estatales y municipales, llegaron al lugar y aseguraron la escena. Paramédicos de la Cruz Roja Mexicana confirmaron en el sitio que ninguno de los ocupantes presentaba signos vitales. Autoridades de la FGE recolectaron decenas de casquillos de distintos calibres y se hicieron cargo de las diligencias iniciales.


