
Este jueves, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció sanciones contra 27 personas y empresas ligadas a la familia Hysa, acusada de conformar una compleja red transnacional de lavado de dinero al servicio del Cártel de Sinaloa.
La operación conjunta, en la que participó el Gobierno de México y la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN), puso bajo el reflector una estructura ilegal en distintos continentes.
Quiénes son los Hysa
La familia Hysa es de origen albanés y está encabezada por Luftar Hysa. Además, otros miembros de la familia que participan junto a él en sus empresas y que también han sido señalados en las acusaciones son Arben Hysa, Ramiz Hysa, Fatos Hysa y Fabjon Hysa.

Luftar Hysa, ingeniero de formación, relató parte de su trayectoria en una entrevista con Opinion, recogida en el sitio Insajderi.org. Según su testimonio, inició su vida laboral en su país natal como director mecánico y responsable del departamento de aguas en Cërrik, además de haber tenido actividad política durante los primeros años de la transición democrática albanesa.
Después de los episodios de violencia y la crisis de 1997 en Albania, Hysa se trasladó en 1998 a Sudáfrica, donde ya residían algunos de sus hermanos. En ese país incursionó por primera vez en el sector de los juegos de azar, formando parte de una pequeña comunidad albanesa.
Posteriormente, en 2001 emigró a Perú junto a colaboradores para abrir un negocio de apuestas, permaneciendo allí hasta 2004. Ese año decidió mudarse a México tras identificar oportunidades de expansión en la industria del juego. Desde entonces, ha establecido y operado negocios en el país. Hysa subrayó que es ciudadano mexicano desde 2016 y residente canadiense, mientras que su familia vive en Canadá. En ese entonces él vivía en Cancún.
En la entrevista, Luftar Hysa negó cualquier vinculación con el crimen organizado y atribuyó los señalamientos en su contra a una confusión relacionada con la existencia de otro ciudadano albanés de nombre idéntico, buscado por Interpol en 2010.
Su nombre apareció en los Panama Papers, al respecto, Hysa explicó que exploró el mercado panameño en 2020, aunque sin abrir cuentas bancarias o comerciales en ese país. Reconoció que una empresa relacionada tuvo operaciones en Panamá hasta 2006, lo que a su juicio explica su mención en registros públicos, aunque descartó cualquier ilícito.
Así operaba su red
Aunque sus raíces familiares se encuentran en los Balcanes, las operaciones de su conglomerado abarcan principalmente México, con presencia en los estados de Sonora, Sinaloa, Baja California y Nuevo León, y extensiones en Canadá, Polonia y Albania.
De acuerdo con el Departamento del Tesoro, el grupo utilizó este entramado transnacional para mover grandes sumas de efectivo y facilitar el ingreso de recursos ilícitos al sistema financiero de Estados Unidos y países en Europa.
Las autoridades estadounidenses señalan que el Hysa Organized Crime Group (HOCG) actuaba en coordinación con el Cártel de Sinaloa, que habría dado su aval para que la familia utilizara parte de su territorio como base de operaciones.
Entre las medidas adoptadas por EEUU se encuentra el bloqueo de bienes y derechos de 27 entidades y personas vinculadas directamente con los Hysa, con la consiguiente prohibición para que ciudadanos o empresas estadounidenses mantengan cualquier tipo de relación comercial o financiera con ellos.

Además, 10 casinos mexicanos asociados con la familia fueron desconectados del sistema financiero estadounidense por su papel central en el esquema de lavado de dinero. La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de México también bloqueó cuentas bancarias asociadas a la red.
El modelo operativo incluía la creación y gestión de empresas fachada repartidas en varios rubros, así como un flujo de efectivo trasladado en grandes cantidades desde México hacia Estados Unidos y Europa.
Una investigación publicada en 2023 por La Presse (Canadá) y reproducida por la prensa albanesa, informó que la Comisión de Juegos de Kahnawake (Canadá) decidió revocar la licencia de “key person” (operador clave) a Luftar Hysa, tras una investigación que detectó “transferencias sospechosas” y posibles nexos con grupos criminales mexicanos.
Según los documentos judiciales de la Gendarmería Real de Canadá, “todo indica que el grupo Hysa penetró la reserva indígena de Kahnawake para facilitar el lavado de dinero para el cártel de Sinaloa y para sus propios beneficios”.
El restaurante Mirela, propiedad de Hysa y ubicado en el casino Magic Palace (Kahnawake), figura en los reportes de la autoridad antilavado canadiense (FINTRAC) como origen de 28 millones de dólares canadienses en transferencias realizadas, entre 2019 y 2020, a cuentas en Albania, México, Estados Unidos, Reino Unido e Italia.

Parte de esos recursos fueron enviados a la firma Valona Konstruksion, constructora fundada en 2002 en Albania y vinculada a Besnik Lulaj, empresario albanés de a construcción, aunque FINTRAC señala a Hysa como beneficiario y operador bajo investigación directa.
La decisión de la Comisión de Juegos de Kahnawake (octubre de 2023) detalló que su decisión se basó “en una investigación extensa y profunda realizada por agentes independientes”, y que se revisarían más acciones junto con el consejo Mohawk local. Días después, el casino Magic Palace anunció la terminación de toda relación comercial con Hysa.
¿Qué se dice de ellos en Albania?
El caso también ha generado fuerte impacto político y mediático en Albania. En septiembre de 2022, la presencia de Luftar Hysa en reuniones públicas con el primer ministro Edi Rama fue ampliamente difundida por la televisión local, generando acusaciones desde la oposición sobre supuestos vínculos con redes criminales internacionales.
En ese momento, el propio Rama defendió públicamente a la familia Hysa, calificando los reportes de la prensa extranjera como “calumnias sin fundamento” y aseguró no tener ninguna relación personal, financiera o política con carteles o actividades ilícitas, según reportó el medio local CNA.
En entrevistas con medios tanto en Albania como en México, Luftar Hysa negó cualquier relación con el crimen organizado o con líderes del Cártel de Sinaloa, como Ismael “El Mayo” Zambada. Sostuvo que todas sus actividades empresariales son legítimas y atribuyó las acusaciones a rivalidades y competencia en el sector de casinos y apuestas.

En palabras recogidas por Kapitali, Hysa declaró: “¿He conocido yo a El Mayo? ¿Me dedico a cartas? Solo hago negocios legítimos. ¿Qué está pasando? Absolutamente no”.
Hasta 2025, la familia Hysa no había enfrentado sentencias firmes de tribunales en México, Estados Unidos ni Albania, de acuerdo con constancias de antecedentes no penales aportadas a la prensa por sus abogados defensores y documentos oficiales de la Fiscalía General de la República (FGR) de México.
En el 2023, la FGR resolvió no ejercer acción penal en investigaciones por operaciones con recursos de procedencia ilícita contra los Hysa, por falta de evidencias concluyentes.
¿Cuáles son sus empresas en la mira?
Las empresas bajo investigación y sanción comprenden una amplia variedad de sectores. Entre las más relevantes figuran Entretenimiento Palermo S.A. de C.V., Rosetta Gaming S.A. de C.V., Diversiones Los Mochis S.A. de C.V., El Arte de Cocinas y Beber S.A. de C.V., Cucina Del Porto S.A. de C.V., Bliri S.A. de C.V., H Hidrocarburos S.A. de C.V. y Hysa Forwarders S.A. de C.V..
Varias, como Rosetta Gaming, operan desde Cracovia, Polonia, especializándose en desarrollo de videojuegos para el sector de apuestas, mientras que otras, como H Hidrocarburos, están en el ramo de refinación y distribución de productos petroleros.
El grupo también opera casinos, casas de apuestas, restaurantes, comercios de ropa y calzado, firmas de procesamiento de alimentos y compañías de hidrocarburos. Este diseño multisectorial dio a la red una fachada legal robusta y opciones para dispersar fondos ilícitos entre distintas actividades.


