
Lavar los sartenes puede parecer una tarea sencilla, pero hacerlo de forma incorrecta puede acortar su vida útil, provocar rayaduras y eliminar la capa antiadherente que evita que los alimentos se peguen. Afortunadamente, existen métodos caseros y ecológicos que permiten mantenerlos como nuevos sin recurrir a químicos abrasivos.
La clave está en una mezcla simple, económica y segura que combina bicarbonato de sodio, vinagre blanco y jabón neutro para trastes. Esta fórmula elimina residuos de grasa, olores y manchas difíciles sin dañar la superficie de los sartenes, incluso los de teflón o cerámica.
Ingredientes:
- 1 cucharada de bicarbonato de sodio
- ½ taza de vinagre blanco
- 1 chorrito de jabón líquido neutro
- 1 taza de agua caliente

Preparación y uso:
- Mezcla el agua caliente con el jabón y el vinagre en un recipiente.
- Agrega el bicarbonato poco a poco, ya que al reaccionar con el vinagre genera efervescencia.
- Sumerge una esponja suave o un paño de microfibra en la solución.
- Frota el sartén con movimientos circulares, evitando el uso de fibras metálicas o estropajos duros.
- Enjuaga con agua tibia y seca inmediatamente con un trapo limpio para prevenir manchas de agua o corrosión.
Este método es eficaz porque el vinagre disuelve la grasa y neutraliza olores, mientras que el bicarbonato actúa como un limpiador suave que no raya ni deteriora el recubrimiento. El jabón neutro ayuda a desprender los restos de comida sin alterar la superficie del sartén.
¿Qué no se debe hacer hacer?
Los expertos en utensilios de cocina recomiendan evitar productos abrasivos, como cloro, detergentes muy concentrados o limpiadores en polvo. Tampoco se deben utilizar esponjas metálicas, cuchillos o utensilios afilados para retirar los residuos, ya que esto puede dañar la capa antiadherente.
Asimismo, no se recomienda dejar los sartenes sumergidos por horas en agua jabonosa, especialmente los que tienen mango de madera o recubrimiento esmaltado, ya que la humedad puede afectar su estructura y provocar desprendimiento del material.

Si un sartén presenta una capa pegada de grasa o residuos quemados, se puede realizar una limpieza profunda con la misma mezcla, pero dejando actuar el líquido dentro del sartén caliente (fuera del fuego) durante 10 minutos antes de frotar. Esto ablanda los restos sin necesidad de raspar.
Para los sartenes de hierro fundido, la técnica cambia: no se usa jabón ni vinagre. En su lugar, se recomienda limpiar con sal gruesa y una toalla de papel, y después aplicar una ligera capa de aceite para conservar el curado natural.
Cuidar es ahorrar
Usar mezclas suaves no solo protege la superficie de los sartenes, sino que también alarga su vida útil y evita la liberación de microplásticos o metales dañinos por desgaste. Además, son alternativas ecológicas y seguras para el hogar.
Con esta mezcla de bicarbonato, vinagre y jabón neutro, tus sartenes quedarán limpios, brillantes y listos para cocinar sin miedo a que se dañen. Porque cuidar tus utensilios también es una forma de cuidar tu cocina y tu salud.


