La diputada del Partido Acción Nacional (PAN), Kenia López Rabadan, se pronunció a través de sus redes sociales la tarde de este 6 de noviembre de 2025, debido a las declaraciones del sacerdote Alfredo Gallegos, conocido como “El Padre Pistolas” en contra de la gobernadora de Guanajuato, Libia Denisse García.
La presidenta de la Mesa Directiva en la Cámara de Diputados escribió el siguiente mensaje en su cuenta oficial de X:
“En México, la violencia política contra las mujeres no puede ser tolerada ni minimizada. Hoy, la gobernadora de Guanajuato, Libia Dennise, ha sido objeto de amenazas y agresiones verbales que representan un ataque directo a su persona y a su encargo”.
La legisladora del blanquiazul aseguró que esta situación no se puede quedar solo en condenar o señalar lo dicho: “Que se investiguen y sancionen las amenazas contra la Gobernadora de Guanajuato, y que toda expresión de violencia política sea tratada como lo que es: un delito”.
Dichos del “Padre Pistolas” surgieron por la construcción del acueducto Solís
El sacerdote católico apodado “Padre Pistolas”, reconocido por portar una pistola como medida de seguridad y por compartir sus sermones a través de redes sociales, pronunció una amenaza durante su misa el pasado fin de semana contra la gobernadora de Guanajuato.
Señaló a la mandataria estatal como responsable de impulsar la construcción del acueducto Solís, proyecto que, según él, perjudicaría a su comunidad.
Durante su homilía, declaró: “Y ese pinche gobernador quiere matarnos de hambre. Ya dije, si insiste nos levantamos en armas. Yo le voy a partir de su madre, a ella, porque es la culpable de que nos vaya a matar de hambre todos”.
Gobernadora de Guanajuato responde a las amenazas
Libia Denisse García, gobernadora de Guanajuato, enfatizó que la violencia cotidiana contra las mujeres nunca debe aceptarse.

“Saben ustedes cómo se expresa, es lamentable y es condenable, pero no voy a perder mi tiempo en ello, yo voy a seguir trabajando y seguiré condenando los casos de violencia que se presenten contra las mujeres”, declaró.
Aunque rechazó dedicar atención a los dichos del sacerdote Alfredo Gallegos, insistió en la gravedad de los señalamientos de género: “Lo condeno públicamente porque ninguna mujer con cargo o sin cargo, debemos de ser víctimas de ningún tipo de señalamiento de esta naturaleza”.
A pesar de las declaraciones del párroco, decidió no presentar una denuncia asegurando que “no tiene ni siquiera sentido que denunciemos una situación así”.
Al concluir, recalcó: “Me parece que en este caso ni siquiera vale la pena hacer caso a un personaje como el que se refiere a mí de esa manera”.


