
El Congreso de Perú declaró este jueves a la presidenta Claudia Sheinbaum, como “persona non grata”, acusándola de una “inaceptable injerencia” en los asuntos internos del país andino.
La decisión, impulsada por bancadas de derecha, fue aprobada con 63 votos a favor, 33 en contra y dos abstenciones, en un nuevo capítulo de la tensión diplomática entre ambas naciones.
La figura de “persona non grata” tiene sustento en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, que permite a un Estado rechazar o expulsar a representantes extranjeros si considera que han vulnerado su soberanía o interferido en su política interna.

Aunque se aplica principalmente a diplomáticos presentes en el territorio, su uso con jefes de Estado suele tener un efecto más simbólico que práctico.
En este caso, Sheinbaum no se encuentra en Perú, por lo que la declaratoria no implica una expulsión física ni una prohibición de entrada formal.
Tampoco tiene efectos directos en materia comercial o jurídica. Sin embargo, sí representa un mensaje de rechazo público y una profundización del aislamiento político entre ambos gobiernos.
La decisión se suma al rompimiento de relaciones diplomáticas anunciado meses atrás por Perú, tras el asilo concedido por México a la exprimera ministra Betssy Chávez, acusada de rebelión por la crisis derivada del fallido autogolpe del expresidente Pedro Castillo.

La presidenta mexicana ha expresado en reiteradas ocasiones su apoyo a Castillo, a quien considera víctima de persecución política.
Tras reunirse con el abogado defensor del exmandatario, Sheinbaum afirmó que su encarcelamiento es “injusto” y que “la libertad de Pedro Castillo es también la defensa de la democracia y de la dignidad de nuestros pueblos”.
Estas declaraciones fueron interpretadas por Lima como una intromisión directa en un proceso judicial interno.
No es la primera vez que Perú recurre a esta medida contra un jefe de Estado extranjero.
Antes fueron declarados non gratos el expresidente Andrés Manuel López Obrador y el mandatario colombiano Gustavo Petro, ambos por críticas al gobierno de Dina Boluarte.
La moción contra Sheinbaum había sido dictaminada desde octubre, pero no se había votado en el pleno debido a la crisis política que llevó a la destitución de Boluarte y al ascenso temporal del presidente del Congreso, José Jerí.
¿Qué significa en los hechos ser declarada persona non grata?
No existen sanciones legales inmediatas, pero sí consecuencias diplomáticas: puede implicar la retirada formal de embajadores, la cancelación de visitas oficiales, la suspensión de acuerdos bilaterales o un deterioro mayor de la credibilidad internacional de la figura señalada.

Más que un acto jurídico, se trata de una herramienta política para expresar desaprobación total.
El gobierno mexicano calificó la medida como “excesiva y desproporcionada”, defendió el asilo otorgado a Chávez como un acto apegado al derecho internacional y negó cualquier intervención en la política peruana.
Con esta declaratoria, la crisis bilateral alcanza un nuevo punto de tensión, sin señales de distensión a corto plazo.


