En Argentina, donde el asado es considerado casi una religión gastronómica, un joven mexicano logró sorprender —y conquistar— a su nueva familia política con una propuesta inesperada: acompañar la tradicional parrillada con tortillas hechas a mano. La escena fue grabada por su novia y rápidamente se volvió viral en redes sociales, acumulando millones de reproducciones y cientos de comentarios.
El curioso episodio fue compartido por Camila, usuaria de TikTok identificada como @chuchiniymila, quien relató entre risas cómo su pareja decidió llevar un toque mexicano a la mesa de sus suegros argentinos.
En el video se escucha decir: “Miren, estamos acá en Argentina y mi novio se puso a hacer tortillas con este paquete de dulce de arepas”, explicó mientras lo grababa en plena acción frente a la cocina.
Sorprendida, Camila le preguntó por qué había decidido preparar tortillas justo ese día, a lo que él respondió con toda seguridad:
“Tu papá iba a hacer un asado, y unas buenas tortillitas son esenciales para acompañar la carne argentina. Debería salir riquísimo”.
El gesto no solo llamó la atención por su audacia, sino también por la dedicación del joven, quien, según relató su novia, llevó desde México una aplanadora de tortillas para asegurarse de que salieran perfectas. El resultado, según los suegros argentinos, fue todo un éxito. “Quedaron deliciosas”, confirmó Camila al final del clip, mientras mostraba a su familia disfrutando del singular acompañamiento.
El video generó un sinfín de reacciones en redes sociales. Algunos usuarios elogiaron el entusiasmo del mexicano por compartir parte de su cultura, mientras otros se mostraron divertidos por el choque gastronómico entre dos tradiciones tan arraigadas. “¡El asado va con pan, papá!”, comentó uno de los internautas argentinos, mientras otros pedían el dato para conseguir una “plancha para hacer las tortillas redondas”.
La publicación superó el millón de visualizaciones, convirtiéndose en uno de los contenidos más comentados de la semana. Muchos usuarios destacaron la manera en que el joven combinó dos símbolos culinarios de países distintos: la carne argentina, reconocida mundialmente, y las tortillas mexicanas, elemento esencial de su gastronomía.
Más allá del humor y la sorpresa, el video se transformó en una muestra de cómo la comida puede ser un puente entre culturas. Lo que comenzó como un gesto espontáneo se convirtió en una historia que celebra la diversidad y la unión familiar a través del sabor.
