
Previo a este 1 y 2 de noviembre de 2025, días en los que se conmemora el Día de Muertos, familias que integran la Colectiva Memoria, Verdad y Justicia Acapulco colocaron una ofrenda en el Zócalo del municipio guerrerense, el pasado 29 de octubre.
Entre fotos de sus familiares desaparecidos o difuntos, buscan conservar “su recuerdo”, bajo el lema “Que la memoria nunca muera y la justicia reviva”, encendieron veladoras “para alumbrar sus caminos de regreso a casa”.
Diferenciado de otros altares, las madres colocaron la ofrenda con el objetivo de visibilizar la problemática de personas desaparecidas, ya que cada ausencia representa un vacío en el entorno familiar y social, ya que las familias mantienes la esperanza de de encontrarlos con vida.
Medios locales reportaron que en el altar, las mujeres colocaron fotografías de madres y padres buscadores asesinados al enfrentarse a un contexto de abandono institucional que derivo en el asesinato por su labor.
Desde 2010 se ha registrado a familiares buscadores asesinados
Los familiares de personas desaparecidas se enfrentan a un contexto de incertidumbre y violencia mayor al no contar con medidas apropiadas para realizar una labor que ha sido omitida por el Estado, buscar a sus familiares.
Entre falta de medidas de protección y el abandono de las autoridades al realizar labores de búsqueda en campo, madres, padres y familiares de víctimas de personas desaparecidas han sido asesinadas, muchos de estos casos se encuentran con la impunidad constante y el olvido del gobierno.

Marisela Escobedo, madre que buscaba a su hija Ruby Marisol Frayre de 16 años, fue asesinada a las puertas del del Palacio de Gobierno de Chihuahua el 16 de diciembre de 2010, buscaba que la desaparición y el posterior asesinato de su hija no quedara impune, sin embargo, Sergio Barraza, el culpable de este delito nunca fue condenado.
Tras dar a conocer su historia y exhibir el nombre de los responsables del secuestro de Leopoldo Valenzuela Gómez, su padre, Leopoldo Valenzuela Escobar, “Don Polo”, fue asesinado en Nuevo Ideal, Durango, en febrero de 2011.
El integrante del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, Nepomuceno Moreno Núñez, fue asesinado en Hermosillo, Sonora, el el 28 de noviembre de 2011, luego de denunciar la detención ilegal y desaparición forzada de su hijo Jorge Mario en julio de 2010.
Tras la desaparición de Edgar García Hernández, de 25 años, el 12 de febrero de 2012, cuando hombres armados irrumpieron en su vivienda y se lo llevaron por la fuerza, Sandra Luz Hernández decidió integrarse al colectivo Madres con Hijos Desaparecidos, con sede en Culiacán, Sinaloa. El 12 de mayo de 2015, mientras acudía a una cita con un presunto informante que le prometió datos sobre el paradero de su hijo, fue asesinada en Sinaloa.
El 22 de diciembre de 2015,Bernardo Carreto fue asesinado en Tepozcuautla, Guerrero, mientras se desplazaba junto a su familia en una camioneta. Sus hijos,Víctor, Juan y Miguel Carreto Cuevas, de 15, 20 y 23 años, permanecían desaparecidos desde el 10 de mayo de ese año, tras ser secuestrados por un grupo armado en un retén ubicado en la entrada de Chilapa de Álvarez, Guerrero.
En junio de 2016, José de Jesús fue asesinado en Poza Rica, Veracruz, a pocos metros de la fiscalía estatal, mientras circulaba en su auto; su esposa resultó herida. Desde mayo de 2011, buscaba a su hija Jenny Isabel Jiménez Vázquez, de 23 años, quien desapareció después de salir a cenar con amigos y no regresar jamás.
Tras impulsar la detención de al menos nueve implicados en el secuestro y asesinato de su hija Karen Alejandra Salinas Rodríguez, Miriam Rodríguez comenzó a recibir amenazas, resultado de sus propias investigaciones sobre los responsables del plagio. Karen Alejandra, de 16 años, desapareció en enero de 2014 en Tamaulipas, tras haber sido secuestrada. El 10 de mayo de 2017, los responsables privaron de la vida a Miriam Rodríguez en su domicilio, ubicado en San Fernando, Tamaulipas.
Dos semanas después de acudir a una cita tras recibir una llamada de un supuesto informante sobre su hermano, el cuerpo de Pablo Iván Miramontes fue hallado en una fosa clandestina situada a pocos kilómetros de la vivienda familiar. El buscador desapareció en abril de 2018 en el centro de Guadalajara, Jalisco, exactamente 100 días después de la desaparición de su hermano César Alejandro.
Entre los casos más recientes se encuentra el asesinato de la María del Rosario Zavala el 14 de octubre de 2020,Después de participar en una jornada de búsqueda donde un joven le aseguró tener información sobre el paradero de su hijo Yatziri Misael Cardona Zavala, de 16 años.
En 2023, Teresa Magueyal Ramírez, fue asesinada en la comunidad de San Miguel Octopan, Guanajuato, cerca de un jardín de niños donde iba en bicicleta. la mujer buscaba a su hijo José Luis Apaseo Magueyal, desaparecido el 6 de abril de 2020, en Celaya, Guanajuato.
La crisis de familiares desaparecidos asesinados ha alcanzado al gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, apenas el 22 de marzo de 2025, Teresa González Murillo, quien buscaba a su hermano Jaime, fue asesinada luego de resistirse a un secuestro en su casa en el estado de Jalisco.


