El incendio ocurrido la madrugada del 29 de octubre en el Relleno Sanitario operado por Simeprode llevó a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a ejecutar la clausura provisional de la zona de descarga de residuos en Salinas Victoria, Nuevo León.
La medida preventiva afecta el área conocida como “frente de tiro”, ubicada en el kilómetro diez y medio de la Carretera a Colombia, según informó la dependencia federal.
Cabe destacar que las llamas se pudieron ver en varios puntos del norte del área metropolitana, debido a la dirección del viento, esta generó que el humo llegue hasta sectores como Huertas de San Mario y Villas del Arco.
La propagación se dio de manera rápida debido a que las llamas consumían basura y residuos industriales, pese a la magnitud las vialidades no fueron clausuradas. Medios locales informaron que el siniestro tuvo lugar casi un año después de que ocurriera un incendio en este mismo sitio.
Inspectores de Profepa acudieron al lugar después de que Bomberos y Protección Civil de Nuevo León coordinaron el control del siniestro, movilizando maquinaria pesada, una pipa de veinte mil litros de agua, equipos de enfriamiento y material de cobertura de tierra en un esfuerzo conjunto con los operadores del relleno.
Durante la inspección, los funcionarios constataron que las labores contra incendios se realizaron bajo el protocolo interno del sitio. Sin embargo, la dependencia advirtió que incidentes de este tipo pueden provocar la emisión de contaminantes atmosféricos que ponen en riesgo la salud y el ambiente.
El recorrido de las autoridades reveló que el siniestro se localizó en la zona de disposición de Residuos Sólidos Urbanos (RSU). Frente a los riesgos de propagación y contaminación, la Profepa colocó dos sellos oficiales y delimitó un perímetro de cerca de tres mil metros cuadrados, ejecutando una clausura total temporal del área afectada.

La dependencia dispuso además la aplicación urgente de medidas para evitar la extensión del fuego, ordenando al operador destinar temporalmente otra celda de emergencia para el manejo de los residuos.
La autoridad ambiental aclaró que la clausura permanecerá vigente hasta comprobar la total extinción del incendio y la inexistencia de riesgos de réplica.
Mientras tanto, el operador tiene prohibido usar el “frente de tiro” para nuevas descargas y debe cumplir con todas las obligaciones impuestas.
“La Profepa continuará con las acciones de seguimiento para verificar el cumplimiento de las medidas ordenadas y de la normatividad ambiental”, puntualizó la dependencia federal.


