
La Fiscalía General de Justicia del estado de Baja California (FGEBC) dio a conocer la vinculación a proceso de Oscar Manuel “N”, alias “El Chaparro Lugo” y de Eduardo Agustín “N”, alias “La Pili”, por los delitos de homicidio calificado por ventaja y homicidio calificado en grado de tentativa.
Los sujetos fueron señalados como principales generadores de violencia en el municipio de San Felipe, y presuntos asesinos de Abel Roberto Román Bojórquez, nieto de la madre buscadora Patricia Orozco y fundadora del colectivo “Tu madre sigue tu lucha Birzvit Román”.
De acuerdo a la fiscal general del estado, María Elena Andrade Ramírez, durante las labores de inteligencia e investigación, también fue detenido Abraham Alexis “N”, alias “El Pelo Cochi”.
Además, se dio a conocer que los sujetos permanecerán en prisión preventiva y que el periodo en el que se mantendrán las investigaciones será por cuatro meses para fortalecer la carpeta de investigación.
Por otra parte, la fiscal Andrade Ramírez subrayó que los detenidos están vinculados a hechos caracterizados por una violencia extrema hacia las víctimas. Entre los casos mencionados, destacó un triple homicidio ocurrido el 29 de mayo en un campo de béisbol, donde se encontraron tres cuerpos apilados en la barda de ese campo de béisbol. Además, hizo referencia a otro asesinato perpetrado dentro de un vehículo Tacoma negro el 6 de julio de 2025 y a la agresión mortal contra Abel Roberto Román Bojórquez el pasado 8 de septiembre del mismo año.
La investigación, según la fiscal, permanece abierta ante la posible implicación de los arrestados en otros delitos de alto impacto en la localidad. Andrade Ramírez enfatizó la brutalidad de los crímenes. Finalmente, añadió que los implicados mantienen nexos con el tráfico de drogas y la posesión de armas de fuego de competencia federal en el puerto de San Felipe.
Así fue el asesinato de Abel Roberto Román Bojórquez en San Felipe, Baja California

El asesinato de Abel Roberto Román Bojórquez, joven de 18 años y nieto de la madre buscadora Paty Orozco, ocurrió la noche del 8 de septiembre en el municipio de San Felipe, Baja California, cuando llegaba a la casa de su abuela.
Más de 90 colectivos y agrupaciones de búsqueda, junto a 134 familias y personas solidarias, repudiaron el crimen y exigieron un alto a la violencia en la región. La indignación de los colectivos se intensificó al recordar que Paty Orozco había solicitado protección para ella y su familia tras recibir amenazas, pero el Mecanismo Estatal de Protección de Defensores de Derechos Humanos y Periodistas rechazó activar medidas eficaces.
En su pronunciamiento, los grupos señalaron: “El Estado ha fallado en garantizar que nuestros seres queridos no desaparezcan, ha fallado en buscarles y ha fallado en protegernos. ¡Que buscar no cueste la vida!”.
San Felipe, puerto pesquero con poco más de 17.000 habitantes, enfrenta una escalada de violencia, con reportes recientes de homicidios y extorsión. El 3 de septiembre se registró un doble asesinato y el día 6 otro hombre fue acribillado en la vía pública.
<br>


