Según el Sistema Sismológico Nacional, el 19 de octubre de 2025 se reportaron 16 microsismos en las inmediaciones de San José del Cabo, Baja California Sur.
Todos estos eventos ocurrieron entre 5 y 7 kilómetros al suroeste de la ciudad, con magnitudes entre 1.3 y 1.8, y profundidades que oscilaron entre 12,2 km y 14,6 km.
Mientras que los sismos de mayor magnitud ocurrieron frente a las costas de Chiapas, en la región norte de Atoyac de Álvarez, Guerrero, y al sur de Río Grande, Oaxaca.
Destaca el sismo de 3.9 de magnitud a 86 km al suroeste de Huixtla, Chiapas, y otro también de 3.9 a 47 km al norte de Atoyac de Álvarez, Guerrero, así como un movimiento telúrico de 3.7 al sur de Río Grande, Oaxaca.
Durante el 19 de octubre de 2025 se registraron varios microsismos en la zona cercana a San José del Cabo, Baja California Sur, de acuerdo con el Sistema Sismológico Nacional.
El Sismológico Nacional reportó una serie de movimientos telúricos en distintas regiones de México durante las primeras horas del 19 de octubre de 2025. Los sismos registrados presentaron magnitudes que van desde 1.2 hasta 4.2 grados.
La mayoría de los temblores ocurrieron en los estados de Baja California Sur, Chiapas y Oaxaca. Sobresale la zona próxima a San José del Cabo, en Baja California Sur, donde hubo varios sismos menores cuya magnitud osciló entre 1.3 y 3.0 grados. Estos eventos se localizaron cerca del mar y a profundidades variando entre 11 y 24 kilómetros.
En Chiapas se registraron temblores de hasta 4.1 grados, como el ocurrido a 121 kilómetros al suroeste de Tonalá. Otros sucesos notables se dieron cerca de Ciudad Hidalgo, Arriaga, Huixtla, Tonalá y Pichucalco.
En el caso de Oaxaca, el sismo más relevante fue uno de 4.2 grados, detectado a 14 kilómetros al noreste de Ocotlán de Morelos, con una profundidad de 62 kilómetros.
Los sismos menores a 2 grados pueden pasar inadvertidos por la población y suelen ser parte de la actividad normal de las regiones donde la tierra tiene más movimiento. Los temblores entre 3 y 4 grados, como los sentidos en Chiapas, Oaxaca, Jalisco, Michoacán y Colima, pueden sentirse en zonas cercanas al epicentro, pero rara vez ocasionan daños.
Las profundidades de los sismos registrados van desde apenas 3.5 hasta más de 100 kilómetros bajo la superficie terrestre. Las profundidades mayores generalmente implican menor percepción en la superficie.
Los temblores ocurridos la madrugada de este domingo representaron el comportamiento natural de las zonas sísmicas mexicanas, con epicentros principalmente en costa del Pacífico y estados del sur del país, así como en Baja California Sur. La mayoría tuvieron baja intensidad, lo que significa que en casi ningún caso son perceptibles o generan riesgos para la población o infraestructura. El temblor más fuerte fue de 4.2 grados y tampoco generó reporte de daños.
El Sismológico Nacional continúa monitoreando de manera permanente estos eventos y recomienda mantenerse informados a través de canales oficiales.
Un sismo de 4.1 de magnitud se registró en el municipio de Tonalá ubicado en Chiapas, según informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN).
El Servicio Sismológico Nacional reportó un sismo de magnitud 4.2 en Ocotlán de Morelos, Oaxaca, ocurrido a las 3:01 horas de este 19 de octubre. El epicentro se localizó 14 km al noreste de la ciudad, con una profundidad de 62.4 km.
Un sismo de 4.2 de magnitud se registró en el municipio de Ocotlán de Morelos ubicado en Oaxaca, según informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN).
México es una de las zonas con mayor actividad sísmica en el mundo debido a su ubicación geográfica. El país se encuentra sobre cinco placas tectónicas: la Norteamericana, del Pacífico, de Cocos, de Rivera y del Caribe. El constante choque y movimiento de estas placas provoca sismos, principalmente en la costa del Pacífico, el sur y centro del país.
En caso de sismo, es fundamental mantener la calma. Si estás en un lugar seguro, permanece ahí; aléjate de ventanas, objetos que puedan caer y estructuras inestables. Si estás en la calle, busca un área libre de postes y cables. Después del movimiento, revisa posibles daños, corta el suministro de gas y electricidad si es necesario, y sigue las indicaciones de Protección Civil.
Contar con un plan familiar, una mochila de emergencia y participar en simulacros puede salvar vidas.