
A pesar del endurecimiento de las políticas arancelarias impulsadas por Estados Unidos, el crecimiento de las exportaciones mexicanas ha superado las expectativas y refleja una diversificación notable, de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Durante la presentación de las Perspectivas Económicas Regionales de octubre de 2025 para el Hemisferio Occidental, Nigel Chalk, director adjunto del Departamento del Hemisferio Occidental, indicó que el panorama de la relocalización de empresas en México dependerá de la revisión del T-MEC prevista para 2026.
Según el FMI, “nos ha sorprendido lo bien que se han comportado las exportaciones. México está mucho más diversificado en las exportaciones que hace unos años. Hemos visto más exportaciones de productos electrónicos, de productos de alto valor y, por supuesto, automotriz, que es un sector importante y esto nos ha proporcionado ciertos márgenes, pero depende un poco de cómo van las negociaciones y cuáles van a ser las condiciones que acuerden las tres partes”, declaró Chalk.
Enfatizó también que las medidas arancelarias adoptadas desde el gobierno del presidente Donald Trump representaron un desafío considerable para México, aunque el impacto no ha sido tan negativo como se anticipaba gracias a la evolución del sector exportador.
Importa más revisión del T-MEC

En cuanto a la reforma al Poder Judicial, Rodrigo Valdés, director del Departamento del Hemisferio Occidental, respondió ante la prensa que los inversionistas muestran mayor preocupación por la revisión del T-MEC en 2026 y por las políticas arancelarias de Estados Unidos que por los cambios en la estructura judicial mexicana. Según Valdés, se espera que la reforma no ponga en riesgo la independencia del Poder Judicial.
Valdés también se refirió a la situación de las remesas enviadas a México, señalando que el FMI ha detectado “más atonía en las remesas” que llegan al país. Comentó que actualmente se observa un aumento en el monto enviado por transacción, pero que no se trata de un flujo persistente.
Además, la dificultad para la contratación de nuevos migrantes en Estados Unidos plantea la posibilidad de una reducción en el flujo de estos recursos, aunque este escenario todavía no se materializa.
Desaceleración económica

Las proyecciones del FMI para 2025 mantienen la perspectiva de una desaceleración económica en México, atribuida a la consolidación fiscal en curso, a una política monetaria que sigue siendo restrictiva y a desafíos derivados de la incertidumbre en materia arancelaria.
Todo esto ocurre en el contexto de la profunda integración de la economía mexicana con Estados Unidos, aunque el organismo reconoció la “reciente resiliencia de las exportaciones” nacionales. En días recientes, la institución revisó al alza su previsión de crecimiento para el PIB mexicano de 0,2% a 1,0% para el año en curso.
A nivel regional, el FMI mencionó que el crecimiento de los socios comerciales de América Latina y el Caribe se moderará. En el caso de Estados Unidos, el organismo estima un crecimiento del PIB del 2,0% para 2025, mientras que China se expandirá 4,8% y la zona euro alcanzará solo 1,2%.
Además, el informe destaca que, pese al contexto global desfavorable, en 2026, una política macroeconómica menos restrictiva y la estabilización de los mercados podrían facilitar una recuperación gradual para América Latina.
Respecto a los costos, el FMI subrayó que la desinflación avanza lentamente en América Latina, con repuntes temporales reportados en los precios de México, Brasil y Colombia. En el caso específico de México y Brasil, la inflación aumentó a principios de año debido a la fuerte demanda interna y al retardo en el impacto de la depreciación cambiaria, aunque este fenómeno se atenuó durante el verano.