
La magnitud de las inundaciones en el norte de Veracruz ha dejado a cerca de 600 mil habitantes en situación de emergencia, con familias evacuadas y otras aún atrapadas en sus viviendas tras el desbordamiento de varios ríos.
En las últimas 72 horas, las lluvias intensas han provocado daños en 200 viviendas, la incomunicación de cinco localidades y la muerte de al menos cinco personas, entre ellas estudiantes universitarios, un médico y un policía municipal.
La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, comunicó la noche del viernes 10 de octubre que la situación en Poza Rica muestra signos de mejoría, aunque el gobierno estatal permanece atento a la evolución de la vaguada que se desplaza hacia el norte.
Nahle detalló que ha mantenido comunicación con Laura Velázquez, directora de Protección Civil nacional, y con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para coordinar la respuesta ante la emergencia.

En su mensaje, la mandataria informó sobre el desbordamiento de ríos en Tuxpan y reportes de afectaciones en Tempoal, El Higo y Pánuco. Además, anunció que, si las condiciones lo permiten, este sábado se intentará establecer un puente aéreo hacia Zontecomatlán, una operación que no había sido posible anteriormente debido a las condiciones meteorológicas.
El municipio de Álamo se ha convertido en una prioridad para la atención estatal, con el envío de víveres, atención médica, plantas potabilizadoras de agua y cocinas instaladas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), así como la realización de rescates de personas atrapadas por las inundaciones. Nahle expresó su reconocimiento a Protección Civil estatal y subrayó la resiliencia de la población al afirmar: “Somos un pueblo trabajador y un pueblo que sale adelante”.
Las precipitaciones han afectado a varios estados del país debido a la presencia de dos tormentas tropicales en territorio mexicano, siendo Veracruz el más impactado por Raymond, fenómeno que provocó el desbordamiento de los ríos Tecolutla y Cazones.
El temporal ha obligado a suspender clases y actividades regulares en numerosos municipios, donde se han registrado inundaciones y encharcamientos de una magnitud que, según testimonios de habitantes, no se había visto en más de 20 años.
La Secretaría de Marina (SEMAR) mantiene activo el Plan Marina en su fase de auxilio en la región norte del estado. El operativo involucra a 100 elementos navales, diecisiete vehículos y equipo especializado para la reducción de niveles de agua y generación eléctrica.
Según la dependencia, el despliegue permitió trasladar a 116 personas a zonas seguras y realizar tres evacuaciones médicas, acciones que, en palabras de la institución, refuerzan el compromiso de salvar vidas en situaciones críticas.
En total, se han desbordado los ríos Tecolutla, Cazones, Pantepec y Nautla, así como los arroyos Estero del Ídolo y Oro Verde. Usuarios en redes sociales han documentado la fuerza de los caudales, que no han disminuido pese al paso de las horas, y han mostrado imágenes de comunidades bajo el agua, como Poza Rica, donde el río Pantepec también se desbordó.
El número de víctimas mortales reconocidas oficialmente por las autoridades estatales ascendió a cinco. Entre ellas se encuentran Cristina Montes Cortés y Diana Cuervo Santos, estudiantes de medicina veterinaria y psicología de la Universidad Veracruzana, cuyos decesos fueron confirmados por el senador morenista Manuel Huerta Ladrón de Guevara en sus redes sociales.
El Instituto Tecnológico de Poza Rica informó sobre la muerte de Carlos Eduardo Baltazar Ramírez, alumno de Ingeniería Mecatrónica, durante las inundaciones en esa ciudad. Además, se reportan estudiantes desaparecidos.
Las otras víctimas son Práxedes García, policía municipal de Papantla que fue arrastrado por la corriente del río Tecolutla mientras auxiliaba a la población damnificada, y David Salazar Hernández, médico del programa IMSS Bienestar en la sierra de Zongolica, quien falleció al caer en un barranco de 30 metros de profundidad tras un derrumbe en la carretera Orizaba-Zongolica cuando se dirigía al hospital.