
La agencia calificadora Fitch Ratings elevó la nota IDR de largo plazo en moneda local y extranjera de Petróleos Mexicanos (Pemex) a ‘BB+’ desde ‘BB’, con una perspectiva estable.
Este movimiento se produce tras la culminación de una oferta pública de adquisición por 9.900 millones de dólares en ocho series de valores, una operación que fue respaldada financieramente por el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum.
El reciente ajuste en la calificación crediticia de Pemex refleja un cambio relevante en la percepción de riesgo sobre la petrolera estatal mexicana, esto después de que la Secretaría de Hacienda implementó un plan de rescate.
La decisión de Fitch Ratings se fundamenta en la ejecución exitosa de esta operación financiera, que permitió a Pemex mejorar su perfil de deuda.
La agencia destacó que el respaldo del gobierno mexicano fue determinante para el resultado de la oferta, lo que contribuyó a fortalecer la posición crediticia de la empresa.
Además, Fitch Ratings subrayó la importancia de las recientes reformas legislativas implementadas en México, que otorgan a Pemex la posibilidad de compartir el techo de deuda con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Según la agencia, “México ha implementado medidas legislativas que permiten a Pemex compartir el techo de deuda con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Estos cambios buscan abordar significativamente el apalancamiento y el costo de financiamiento de la compañía”.
Con este ajuste, la perspectiva estable asignada por Fitch Ratings indicó que, en el corto y mediano plazo, no se anticipan variaciones significativas en la calificación de Pemex, siempre que se mantengan las condiciones actuales de respaldo gubernamental y disciplina financiera.
Cae la producción de Pemex
Las exportaciones de crudo de Pemex registraron en agosto una caída de casi 17% respecto a julio, situándose en 500.203 barriles por día (bpd), y una disminución interanual del 32%.
Al mismo tiempo, las importaciones de petrolíferos descendieron de forma significativa, mientras que el procesamiento en las refinerías nacionales experimentó un leve incremento.
La petrolera estatal ha proyectado que para 2026 las exportaciones de crudo se ubiquen en 487.900 bpd, y para 2035 en 393.100 bpd.
Esta reducción responde a la estrategia de procesar internamente una mayor proporción del crudo para satisfacer la demanda nacional de combustibles.
Durante agosto, las siete refinerías de Pemex en México procesaron en conjunto 1,05 millón de bpd, lo que representa un aumento de casi 3% frente a julio y de 6,2% en comparación interanual.
La empresa ajustó recientemente su capacidad instalada de refinación a 1,4 millón de bpd, por debajo de los 1,6 millón de bpd previos, pese a la incorporación de la nueva refinería Olmeca, diseñada para 340.000 bpd pero aún sin alcanzar ese objetivo.
La compañía enfrenta una disminución en la producción debido al agotamiento de campos clave y a restricciones presupuestarias, además de mantener elevadas deudas financieras y con proveedores, que las autoridades aseguran estar gestionando.