El dólar estadounidense cotizó al cierre a 18,44 pesos mexicanos en promedio, lo que supuso un ascenso del 0,32% con respecto a los 18,38 pesos de la jornada anterior, reporta Dow Jones. El comportamiento refleja un día de ajustes fuertes en el mercado cambiario, en el que la ausencia de datos macroeconómicos relevantes dejó al peso expuesto a factores externos y a movimientos especulativos.
Teniendo en cuenta los últimos siete días, el dólar estadounidense registra una disminución 0,2%, por lo que en el último año todavía mantiene una disminución del 6,91%.
“La depreciación del peso refleja que la moneda continúa altamente sensible a factores externos y políticos, más allá de los datos macro internos. La caída de remesas y la volatilidad cambiaria podrían complicar la dinámica del consumo, uno de los motores de la economía, mientras que la incertidumbre comercial por el T-MEC se mantiene como riesgo latente. Si la presión sobre el tipo de cambio persiste, el Banco de México podría verse forzado a adoptar una postura más firme para preservar la estabilidad financiera”, explica Felipe Mendoza, analista de mercados ATFX LATAM.
Analizando este dato con el de fechas anteriores, acumuló dos sesiones sucesivas en ascenso. La volatilidad de esta semana presentó un comportamiento visiblemente inferior a la volatilidad que reflejaron las cifras del último año, así que está teniendo un comportamiento más estable de lo que indica la tendencia general en estas fechas.
Los pronósticos económicos para 2025

La relación peso-dólar durante el 2024 estuvo marcada por los contrastes. El año comenzó con la moneda mexicana fortalecida ante la divisa estadounidense. El billete verde llegó a venderse en 16 pesos por unidad, algo que no ocurría en casi una década. El mote de “superpeso” quedaba más que nunca.
Sin embargo, como fue avanzando el peso se fue depreciando debido, principalmente, a decisiones políticas, como la polémica Reforma al Poder Judicial y la eliminación de órganos autónomos.
El retroceso de la moneda azteca se agravó con la campaña de Donald Trump, su victoria electoral como presidente de Estados Unidos y sus amenazas de poner aranceles a todos los productos mexicanos –y canadienses– si México no mejoraba la seguridad en la frontera.
Fue así que el dólar regresó a los 20 pesos, quedando muy por arriba de los pronósticos del Banco de México (Banxico).
Para 2025, Banxico espera que el dólar cotice en una media que va desde los 20.24 pesos y hasta los 20.69 pesos, un pronóstico conservador considerando las repercusiones que traerían para el tipo de cambios los dichos y políticas de Trump en la Casa Blanca.
La inflación estuvo relativamente estable en 2024 rondando entre el 4%, a excepción de junio cuando casi alcanza el 6, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En este año, Banxico pronostica que la inflación estará por debajo de los cuatro puntos hasta el 3.8%.
En cuanto al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), los bajos pronósticos se mantienen. El banco central espera un alza del PIB de apenas 1.2%.
Cómo es el peso mexicano
El peso mexicano es la moneda de curso legal de México y se trata de la primera moneda en el mundo que usó el signo de $, mismo que más tarde fue retomado por Estados Unidos para el dólar.
Esta moneda es la decimoquinta moneda más negociada en el mundo, así como la más negociada en América Latina y la tercera a nivel continente sólo detrás del dólar estadounidense y el canadiense.
Actualmente se usa la abreviación MXN para hablar sobre el peso mexicano, pero antes de 1993 se usaban las siglas MXP.
Las monedas que normalmente se usan en México tienen forma semicircular y tienen el escudo nacional al reverso. Un peso mexicano equivale a 100 centavos. Existen monedas de 1, 5, 10 y 20 pesos; mientras que en billetes hay de 20, 50, 100, 200, 500 y 1,000 pesos.