
La desaparición de Tyron Paredes Gamboa, un joven músico venezolano que trabajaba repartidor en México, ha generado consternación, tras difundirse los últimos mensajes de WhatsApp que envió a sus familiares poco antes de perder todo contacto con él.
De acuerdo con la ficha de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), Tyron Paredes Gamboa desapareció el 19 de septiembre de 2025 en Cuautitlán Izcalli, aunque su última ubicación de GPS fue registrada cerca de la caseta Jorobas en Huehuetoca, también en el Estado de México.
El joven trabajaba como repartidor, rol que alternaba con su faceta artística como DJ. Tyron tiene una relación sentimental con Sheila Osorio y es padre de un menor, según información de sus redes sociales.

De acuerdo con la ficha de desaparición, Tyron mide 1.80 metros, es de complexión delgada, tiene cabello negro y ojos color miel. Al momento de su desaparición vestía una playera negra, un pantalón marrón oscuro y tenis grises.
Conducía una motocicleta verde con negro, dato relevante para la búsqueda en redes ciudadanas. Entre sus señas particulares se mencionan tatuajes en el antebrazo izquierdo y en el pecho del mismo lado.
“Puro monte”
Poco antes de que se perdiera la señal, Tyron conversó con su hermana Daniela Paredes por mensajes de WhatsApp, en donde le contó que había ido a hacer una entrega por Delivery, pero las personas que le solicitaron el servicio lo estaban haciendo esperar en un punto en medio de la nada.

Ese intercambio fue difundido a través de la página de Facebook del colectivo “Compartir Para Salvar”. La conversación ocurrió entre las 15:57 y las 16:02 horas.
“Estoy que me devuelvo”, escribió a las 15:57 horas, acompañado de una fotografía tomada con su celular, en la que se observa un extenso terreno abandonado cubierto de hierba. En el mensaje siguiente añadió: “Puro monte pero no sé qué onda”.

El familiar respondió preguntando si debía esperar a alguien en ese sitio: “¿Pero te tienen esperando o qué?“, a lo que Tyron contestó que “sí, pero no sé, no confío nada”. Este fue el último contacto registrado antes de que su teléfono dejara de emitir señal.
Aunque el reporte inicial ubica el hecho en Cuautitlán Izcalli, la evidencia de GPS y los mensajes confirman que el último rastro fue en Huehuetoca.
“Solicitamos urgentemente la colaboración de todos para localizar a nuestro familiar, Tayron Gamboa de nacionalidad venezolana, desaparecido desde el viernes 19 de septiembre de 2025 en México. Él se encontraba trabajando como Delivery cuando perdimos la señal de su GPS a las 4:00 p.m. Desde entonces no hemos tenido ningún tipo de contacto con él“, escribió su hermana en Facebook.

Alarma por casos de músicos colombianos
La desaparición del joven venezolano se produjo en medio de la desaparición y posterior hallazgo sin vida de los músicos colombianos Bayron Sánchez Salazar (B-King) y Jorge Luis Herrera Ramos (DJ Regio Clown), encontrados muertos en un terreno baldío en el Estado de México.
El periodista Antonio Nieto fue uno de los primeros en señalar públicamente la posible vinculación entre ambas desapariciones por su cercanía temporal y geográfica, a través de sus redes sociales compartió: “DESAPARECE otro músico… Ahora, un venezolano: Se trata de Tayron Gamboa, de Caracas. También es Dj y desapareció tres días después que Byron Sánchez y Jorge Luis Herrera. También su última ubicación fue en #Edomex, en Huehuetoca. Indagan nexo con el caso de los colombianos", se lee.

La indignación por la violencia contra artistas también resonó a nivel internacional: Gustavo Petro, presidente de Colombia, condenó a través de sus redes sociales el crimen contra los músicos de su país:
“Asesinaron nuestra juventud en los Estados Unidos de Mexicanos. Mafia internacional fortalecida por la estúpida política militar y prohibicionista, llamada “guerra contra las drogas” a la que obligan a la humanidad y a América Latina. Más jóvenes asesinados por una política antidrogas que no es política antinarcotraficante".
En el caso de los músicos colombianos, se localizó un mensaje junto a los cuerpos, presuntamente firmado por La Familia Michoacana, un grupo delictivo que opera en la región. Las autoridades ya investigan el móvil de los asesinatos.