Aceite de oliva: los beneficios de consumir este alimento en tu dieta

Este alimento clave para tu salud contiene grasas saludables y antioxidantes

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Ventajas de consumir el aceite
Ventajas de consumir el aceite de oliva (Pixabay)

El aceite de oliva, base de la dieta mediterránea, se ha consolidado como uno de los alimentos más recomendados por especialistas en nutrición y organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) debido a su impacto positivo en la salud.

Su riqueza en grasas saludables y antioxidantes lo convierte en un aliado clave para la prevención de diversas enfermedades.

Uno de sus principales beneficios se encuentra en la salud cardiovascular. Al ser rico en ácidos grasos monoinsaturados, especialmente el ácido oleico, ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL, conocido como “malo”, y a incrementar el colesterol HDL, considerado “bueno”.

Lucha contra la hipertensión e infartos

Consumir aceite de oliva ayuda
Consumir aceite de oliva ayuda a prevenir la hipertensión (Foto: Europa Press)

De acuerdo con la American Heart Association, este efecto contribuye a disminuir el riesgo de hipertensión, infartos y accidentes cerebrovasculares.

Además, el aceite de oliva extra virgen posee compuestos antiinflamatorios naturales, como el oleocantal, que actúan de manera similar a los antiinflamatorios farmacológicos, reduciendo procesos inflamatorios que pueden derivar en enfermedades crónicas como la artritis o la diabetes tipo 2.

Su alto contenido en polifenoles y vitamina E lo convierte también en un potente antioxidante, capaz de combatir los radicales libres responsables del envejecimiento celular y el desarrollo de enfermedades degenerativas.

El consumo del aceite de
El consumo del aceite de oliva ayuda al deterioro cognitivo y enfermedades como el Alzheimer (AdobeStock)

Estudios recientes publicados en la revista Nutrients han vinculado su consumo con una mejor protección frente al deterioro cognitivo y enfermedades como el Alzheimer.

Otro aspecto importante es su impacto en el control del peso y el metabolismo. Aunque se trata de un alimento calórico, favorece la sensación de saciedad y mejora la sensibilidad a la insulina, lo que contribuye a la prevención de la obesidad y la diabetes tipo 2.

Expertos recomiendan optar por el aceite de oliva extra virgen, ya que conserva sus compuestos bioactivos en mayor medida. Puede utilizarse en crudo para ensaladas, verduras o pan, pero también es apto para cocinar, ya que soporta temperaturas de hasta 200 °C sin perder sus propiedades.

En este sentido, el aceite de oliva no solo es un ingrediente versátil en la cocina, sino también un recurso natural para fortalecer la salud del corazón, el cerebro y el sistema inmunológico, siempre que se consuma de forma moderada y constante.