Matthew Lyson, propietario de un centro de rescate de patos en Michigan (MDRS), recibió una llamada de su amiga Lisa, quien le alertó sobre dos aves abandonadas en un campo de golf, una zona peligrosa debido a la presencia frecuente de coyotes. Sin dudarlo, el hombre cambió sus planes para acudir de inmediato al rescate y brindarles ayuda.

El refugio dio a conocer la preocupante situación en la que se encontraban los patos a través de una emotiva publicación en su página de Facebook, donde describieron a detalle las condiciones difíciles que enfrentaban estas aves, alertando a la comunidad sobre la urgencia y la gravedad del caso.

Al llegar al campo de golf, Lyson y su amigo Mike, que se unió a la misión, fueron recibidos por un grupo de personas, quienes les explicaron que aquellas dos criaturas habían estado merodeando entre los hoyos 10 y 11, tratando de acercarse a los golfistas por al menos dos semanas o incluso un mes.

“Estaban tan hambrientas que no sorprende que buscaran hacer nuevos amigos”, comentó Lyson en Facebook, ya que aunque contaban con algunos estanques pantanosos como refugio, carecían del alimento necesario en cantidad y calidad.

La pareja de patos desafió todas las probabilidades al resistir en ese entorno, pero Lyson no iba a permitir que permanecieran ni una noche más allí, por lo que decidieron tomar prestado un carrito, localizaron a las aves en un abrevadero cercano y, junto a Mike, las atrajeron con una bolsa de nueces.

Ambos rescatistas se arrodillaron en medio del campo para evitar asustar a los patos y trataron de atraparlas sin usar redes, con la intención de impedir que regresaran al estanque.

Una vez capturadas, las envolvieron con cuidado en sus brazos y las transportaron hasta el coche, sin soltarlas hasta asegurarse de que estuvieran protegidas y a salvo en el refugio.

Las dos aves hallaron un refugio seguro y acogedor que les permitió iniciar una nueva vida, libre de peligros y privaciones. Según informa Lyson a través de la publicación en Facebook, desde su llegada se adaptaron con facilidad al nuevo entorno, mostrando pronto claras señales de recuperación tanto física como emocional.

Los patos descubrieron un hábitat ideal, con varios estanques que les ofrecen un espacio amplio para nadar y desenvolverse con libertad. La tranquilidad y la abundancia de alimento les han permitido recuperar fuerzas y gozar de una vida mucho más saludable y plena.

Además, los trabajadores del santuario señalan que estos animales rápidamente lograron integrarse y formar nuevos vínculos con otras aves y criaturas que habitan el refugio, lo cual fortaleció su bienestar social y emocional, una experiencia que les fue negada durante el tiempo que estuvieron abandonados y en busca de ayuda.

La historia del rescate de los dos patos en el campo de golf ha conmovido profundamente a los usuarios de las redes sociales, quienes han dado sus muestras de apoyo y gratitud con los rescatistas, reflejando su admiración por quienes dedican su tiempo y esfuerzo a salvar vidas animales: “Dios los bendiga por ayudar a los patos”, comentó uno de los internautas.

Por su parte, una usuaria destacó la belleza de estas aves con mensajes como “pequeños ángeles preciosos” y resaltó sus personalidades, especialmente cuando son criados desde sus primeras etapas: “Me encanta cómo se apegan a ti”.

Estas reacciones reflejan no solo el valor del rescate, sino también el efecto positivo que tiene sobre la comunidad, que celebra cada historia de esperanza y protección hacia los seres más vulnerables.