La justicia investiga a la mujer que ofrecía una pistola 9 milímetros en un grupo de chat de Revolución Federal, luego de que el arma fuera encontrada en su casa en un allanamiento.

La nueva línea de investigación se produjo en el marco de la causa en la que el líder de dicha facción partidaria, Jonathan Morel, y tres participantes de esa agrupación, están procesados por el delito de incitación a la violencia.

El allanamiento se hizo el miércoles en la localidad bonaerense de San Fernando. Aunque estaba agendada como “Dali Revolución” (DR), la mujer se llama Lidia, tiene 66 años y entregó de manera voluntaria el arma del cual era legítima usuaria. También se secuestró una caja de unas 50 balas. Fuentes judiciales informaron a Infobae que ahora se peritará su teléfono y que se investiga a la mujer por incitación a la violencia.

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Según se indicó, los investigadores llegaron al secuestro de la pistola 9 milímetros el miércoles pasado, luego de detectar que una persona agendada en el teléfono de Morel como “Dali Revolución” la ofrecía cada vez que se hablaba de realizar acciones violentas que tuvieran por blanco a la vicepresidenta Cristina Kirchner u otro dirigente oficialista.

La causa está en manos del juez Marcelo Martínez de Giorgi y el fiscal Gerardo Pollicita y entre los querellantes están la vicepresidenta y el precandidato presidencial Juan Grabois, ambos víctimas de las acciones desplegadas por Revolución Federal.

La agrupación Revolución Federal quedó en el foco público tras el ataque a Cristina Kirchner. Brenda Uliarte, señalada como coautora del intento de homicidio, participó de una marcha de antorchas en la Casa Rosada el 18 de agosto frente a la Casa Rosada. Allí las consignas eran “reventar la Plaza de Mayo” y “exigir renuncias”. Además, se lanzaron piedrazos, bombas de estruendo y bombas molotov. “Al kirchnerismo, cárcel o bala”, proclamaban.

El 20 de octubre Jonathan Morel, Gastón Guerra, Leonardo Sosa y Sabrina Basile, integrantes de la agrupación Revolución Federal, fueron detenidos y, diez días después, resultaron excarcelados.

Una persona identificada como “Dali Revolución” ofrecía una pistola “9 mm” para la realización de una “actividad bala”. Ante el hallazgo, el fiscal Gerardo Pollicita había requerido, en su momento, que se impusiera el secreto de sumario y que se realicen medidas de prueba para avanzar sobre esa pista.

Cuando pidieron profundizar esta pista, Marcos Aldazaba y José Manuel Ubeira -los letrados que representan a la querella vicepresidenciala- aseguraron que “el cúmulo de pruebas producidas parece indicar” que los hechos por los que se investiga a Revolución Federal podrían ir más lejos que la incitación a la violencia y que podría haber más personas involucradas.

Según los abogados, existen “dos líneas que se desprenden de los elementos de convicción producidos en la causa”. Y agregaron que “una tiene que ver con los mensajes enviados por ‘Dali Revolución’ y, otra, con la intervención del Grupo Caputo en el financiamiento de Revolución Federal”.

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Los mensajes emitidos por DR y hallados en los peritajes tecnológicos realizados sobre los dispositivos de Morel son cuatro:

- El 22 de julio de 2022, “Dali Revolución” respondió a un video identificado como Manifestantes autoconvocados amenazaron de muerte a Cristina Kirchner, con el mensaje: “Lo que fue agresivo fue el mensaje de amenaza de muerte” y “que no es una mala idea tengo una 9 mm, cualquier cosa me avisan”.

- El 22 de julio, tras una convocatoria de Sabrina Basile a “defender al campo” en la Sociedad Rural Argentina, insistió: “Tengo una 9 mm y el mástil de la bandera y tengo fas (sic) pimienta”.

- El 25 de agosto, “Dali Revolución” reaccionó a un video compartido por Jonathan Morel, denominado La llegada de Cristina Kirchner rodeada de militancia, con el mensaje “Una granada ahí (...) Mi límite es la 9 mm que tengo”.

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- El 27 de agosto de 2022, “Dali Revolución” le dijo a Morel: “Yo no estoy en el grupo pero contá conmigo (para) la actividad bala (sic): tengo unas ganas de usar mi 9 mm”.

En ese ínterin, recordó la querella, se produjo la conversación en Twitter Space, en la que Morel sostuvo que, si no fuera conocida su cara para la militancia kirchnerista, se infiltraría entre aquellos que habían ido a apoyar a la Vicepresidenta a su casa, en el marco de lo que fue el pedido de condena en su contra por parte del fiscal Diego Luciani en la causa Vialidad.

Eso que proponía Morel, fue lo que finalmente hizo Fernando Sabag Montiel el 1 de septiembre pasado cuando quiso asesinar a la Vicepresidenta, hecho que se investiga en otro juzgado.

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