
Tormentas eléctricas severas han dejado a más de 50.000 personas sin electricidad en Nebraska durante la madrugada del sábado.
Estos pronósticos anticipan un fin de semana marcado por fenómenos meteorológicos extremos en varias regiones de Estados Unidos.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, la amenaza de condiciones peligrosas se extiende desde el Medio Oeste y las llanuras centrales hasta el Sureste, con pronósticos de lluvias intensas, ráfagas de viento destructivas e inundaciones repentinas que podrían persistir hasta el lunes.
El impacto de estas tormentas no se limita a los cortes de energía

El Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre la posibilidad de “numerosas tormentas eléctricas nocturnas” que afectarán un corredor que va desde el norte de Misuri hasta el sur de Wisconsin.
En su análisis de pronóstico a corto plazo, la agencia detalló que “se pueden esperar totales de lluvia por hora de 6,3 cm junto con totales de lluvia de varios días a nivel local de hasta 23 cm”, lo que eleva el riesgo de inundaciones repentinas en toda la región.
El fenómeno no es exclusivo del Medio Oeste

De acuerdo con la información publicada por NBC News, en el Sureste, se prevé la formación y persistencia de tormentas sobre el norte de Florida y el sur de Georgia durante el fin de semana.
La sucursal local del Servicio Meteorológico Nacional en Jacksonville alertó que “las continuas rondas diarias de fuertes lluvias sobre suelo saturado traerán un riesgo de inundación localizada durante el fin de semana, especialmente en la costa sureste de Georgia”.
Además, en el centro y sur de Florida, se esperan lluvias intensas y tormentas de desplazamiento lento capaces de producir vientos dañinos.
Mientras tanto, el Suroeste enfrenta una situación distinta pero igualmente peligrosa

Un episodio de calor extremo que ha batido récords históricos. El jueves, Phoenix alcanzó los 47 ℃, estableciendo un nuevo máximo diario y mensual para la ciudad.
Otras localidades de Arizona, como Scottsdale, Yuma, Blythe y Deer Valley, también registraron temperaturas sin precedentes, según el Servicio Meteorológico Nacional. Aunque se anticipa un leve descenso térmico durante el fin de semana, la agencia advirtió que las temperaturas podrían acercarse o superar los 43 ℃ (110 ℉) en varias zonas.
En Albuquerque, Nuevo México, la temperatura máxima del viernes llegó a 38,3 ℃ (101 ℉), superando el récord anterior de 36,7 ℃ (98 ℉) establecido en 2011. Una alerta de calor permanece activa hasta la noche del sábado, antes de que se pronostiquen tormentas para el centro y noreste del estado el domingo.
El alcance de la amenaza meteorológica ha sido subrayado también por AccuWeather, que informó sobre el potencial de daños significativos en las llanuras y el Medio Oeste debido a tormentas capaces de generar vientos destructivos, granizo de gran tamaño e incluso tornados.
Ráfagas de viento y alertas de inundaciones podrían afectar en otras regiones

Las áreas comprendidas entre Nebraska y Minnesota se encuentran en riesgo, con ráfagas de viento que podrían alcanzar los 153 km/h (95 mph). La trayectoria de las tormentas continuará hacia el este y el sur, afectando ciudades como Minneapolis, Milwaukee y Des Moines.
El pronóstico para los próximos días indica que el Medio Oeste experimentará una sucesión de tormentas eléctricas nocturnas hasta el lunes, con precipitaciones que podrían acumular hasta 23 centímetros en algunas zonas, lo que incrementa la probabilidad de inundaciones repentinas.
En el Sureste, el desarrollo de tormentas en el norte de Florida y el sur de Georgia mantiene vigente el riesgo de inundaciones localizadas, especialmente en la costa sureste de Georgia.
Ante este panorama, las autoridades recomiendan a los habitantes de las regiones afectadas mantenerse informados y adoptar medidas de precaución para proteger su seguridad frente a estas condiciones climáticas extremas.