
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, se reunió este jueves con el ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Asaad al-Shaibani, para abordar la normalización de las relaciones bilaterales y el cese de las sanciones, tal como lo adelantó la víspera el presidente Donald Trump.
La reunión se produjo en Antalya, Turquía, al margen de una cumbre de la OTAN, e incluyó también a altos funcionarios de Ankara, entre ellos el ministro de Exteriores, Hakan Fidan, por su apoyo a los grupos islamitas en Siria que, en diciembre, lanzaron una ofensiva que derrocó al régimen de Bashar al-Assad.
Durante la cita, que se produjo a puerta cerrada y sin la participación de la prensa, los funcionarios abordaron el vínculo del nuevo Gobierno sirio con la comunidad internacional y evaluaron mecanismos para reducir la presión económica, que data de la década de guerra civil.
En el caso de Estados Unidos, Rubio aprovechó la oportunidad para conversar con al-Shaibani, siguiendo el anuncio de este miércoles de Trump durante su encuentro con el presidente Ahmad al-Sharaa, con quien se comprometió a dar al país la oportunidad de “un nuevo comienzo” y dejar atrás las “guerras eternas”.

En el marco de su gira por los países del Golfo, el republicano hizo una parada en Riad, Arabia Saudita, donde compartió su primer cara a cara con el nuevo Presidente de Damasco.
En él, le transmitió su voluntad de poner fin a las históricas sanciones y restablecer las relaciones diplomáticas, a cambio de cinco condiciones: la adhesión de Siria a los Acuerdos de Abraham para normalizar su vínculo con Israel, la deportación de terroristas extranjeros, la expulsión de grupos terroristas palestinos, la cooperación para evitar el resurgimiento del Estado Islámico y el control de las prisiones del ISIS, actualmente en manos de las fuerzas kurdas.
También, será indispensable evidenciar el compromiso del nuevo Gobierno con garantizar la paz y la inclusión de todas las minorías en el país, tal como anunció al asumir sus funciones a finales de 2024.
“Estoy ordenando el cese de las sanciones contra Siria para darles un nuevo comienzo (...), una oportunidad de paz bajo el liderazgo de al-Sharaa. Les da una oportunidad de grandeza”, declaró Trump.
Al-Sharaa celebró la postura adoptada por la nueva Casa Blanca y consideró su decisión como “valiente” e “histórica”, y un paso clave hacia “el renacimiento de la Siria moderna”, que espera liderar.
“La interacción de las comunidades sirias en el exterior y su contribución constructiva a las demandas de levantar las sanciones ha tenido un impacto significativo. La cohesión y unidad del pueblo, tanto interna como externa, y su cercanía con sus hermanos y buenos vecinos, es un fuerte capital para Siria”, comenzó diciendo.
Asimismo, reiteró -en línea con el pedido estadounidense- su compromiso con “mejorar el clima de inversiones” y garantizar el bienestar y la unidad de su pueblo.
“Siria pertenece a todos los sirios, independientemente de su secta o etnia. La convivencia es nuestra herencia a lo largo de la historia. Las divisiones que nos han desgarrado siempre han sido fruto de intervenciones extranjeras y, hoy, todos las rechazamos”, insistió.
“Siria no será un escenario de luchas de poder ni una plataforma para ambiciones extranjeras”, prometió.
(Con información de AFP, AP y Europa Press)