La ciudad de Los Ángeles fue testigo de una serie de disturbios después de que los fanáticos de los Dodgers celebraran la victoria en la Serie Mundial contra los Yankees de Nueva York. Tras el triunfo por 7-6 en el Juego 5, varias áreas de la ciudad quedaron sumidas en el caos. De acuerdo con reportes de TMZ, “los fanáticos con banderas de los Dodgers comenzaron a lanzar fuegos artificiales, romper ventanas y realizar saqueos en al menos una tienda del área del centro de L.A.”.

La LAPD (Departamento de Policía de Los Ángeles) enfrentó serios desafíos en la noche de la victoria, ya que un autobús fue incendiado cerca del Boulevard Sunset y Echo Park, donde las autoridades calificaron a la multitud como “hostil”.

TMZ también relató las declaraciones de un residente local, Taylor Rosa: “Después de que la conductora salió, todos comenzaron a encender fuegos artificiales dentro del autobús, saltando encima, bailando”. Otros medios como Marca agregaron que “el autobús había sido vandalizado anteriormente por personas vestidas con camisetas de los Dodgers antes de que se declarara una alerta táctica a nivel de la ciudad”.

En cuanto al saqueo, las tiendas de moda fueron un objetivo particular. Según FOX 11 Los Angeles, un establecimiento de Nike en Broadway, en el centro de la ciudad, fue asaltado por una multitud que irrumpió y salió con cajas, acto que fue grabado y publicado en redes sociales. Este medio subrayó que “la LAPD arrestó al menos a cuatro personas antes de que la multitud se dispersara”.

El caos se extendió a otras partes de la ciudad, pero el centro fue el principal lugar afectado. NBC News reportó que múltiples negocios en la misma zona fueron atacados, y cinco pasajeros junto con el conductor lograron evacuar un autobús antes de que fuera incendiado. “La Autoridad de Transporte Metropolitano del Condado de Los Ángeles expresó su decepción y enojo por los actos vandálicos sin sentido en uno de los autobuses tras la victoria de los Dodgers”, informó este medio.

En respuesta a los disturbios, FOX 11 Los Angeles mencionó el despliegue de un gran número de agentes del sheriff en el este de Los Ángeles para disuadir a la multitud. Mientras tanto, lugares emblemáticos de la ciudad como el cartel de Hollywood y el Aeropuerto LAX se iluminaron en azul Dodger para celebrar la victoria.

La respuesta de las autoridades no se hizo esperar. La policía impuso una orden de dispersión para manejar una multitud “hostil” que había rodeado un autobús en la Avenida Echo Park. Este despliegue se coordinó junto con la implementación de varias zonas de dispersión en toda la ciudad, con el fin de anticipar posibles disturbios tras el esperado triunfo.

Por otro lado, la repercusión mediática resaltó la falta de comentarios oficiales sobre los disturbios en algunos compartimentos del gobierno local. TMZ señaló que la alcaldesa de L.A., Karen Bass, publicó un mensaje en X felicitando a los Dodgers, pero no mencionó nada sobre el vandalismo.

Las celebraciones por este logro deportivo continuarán con un desfile programado para el viernes, donde los fanáticos tendrán otra oportunidad de festejar de una manera más moderada. Sin embargo, las imágenes del caos nocturno y los saqueos resaltan la dificultad de mantener la orden en una noche tan importante para la ciudad.

Los triunfos en el campo, como el liderado por jugadores clave como Shohei Ohtani del equipo de los Dodgers, se vieron empañados por los disturbios. Sin embargo, las autoridades mantienen el enfoque en continuar los festejos de manera mesurada, lo que representa un fuerte desafío ante la euforia desmedida de varios fanáticos.