Un hombre deja su coche para una inspección técnica y no lo vuelve a ver hasta ocho meses después: cuando lo recupera, tiene una decena de multas

El vehículo desapareció luego de que un desconocido lo retirara del taller donde fue depositado, generando meses de incertidumbre y múltiples procesos ante las autoridades viales

Guardar
Un hombre deja su coche
Un hombre deja su coche para una inspección técnica y no lo vuelve a ver hasta ocho meses (Pexels)

El día a día de un hombre de 55 años, residente en Toulousse, Francia, se ha complicado por llevar el coche al taller para una simple inspección técnica de rutina. Al parecer, el vehículo, un Nissan Juke prácticamente nuevo, fue sustraído del taller sin conocimiento del propietario y permaneció ocho meses fuera de su alcance, según ha informado La Dépêche. Durante ese período, el dueño recibió numerosas multas por infracciones de tráfico que no cometió.

El incidente tuvo lugar el 16 de enero, cuando el conductor confió las llaves de su Nissan Juke a los empleados de Norauto, un reconocido centro de inspección técnica en la ciudad francesa. Aunque la revisión periódica, obligatoria en Francia, suele transcurrir sin inconvenientes, la jornada se vio alterada por la acción de un individuo que llegó poco después a la recepción. El sujeto implicado se dirigió al personal del taller y sostuvo que el coche era suyo. Afirmó haber dejado su tarjeta bancaria dentro del vehículo y exigió la devolución de las llaves.

Así, ante la insistencia del infractor y el desconocimiento del trabajador por la identidad del propietario, le acabó entregando el coche sin solicitar ningún tipo de comprobante. Este descuido facilitó que el ladrón arrancara el motor del Nissan y abandonara el establecimiento con total impunidad.

Nueve multas en dos semanas

Anuncio Nissan Juke (Nissan)
Anuncio Nissan Juke (Nissan)

El propietario, al regresar en la fecha indicada, se dio cuenta de la ausencia del coche y presentó una denuncia de inmediato. La Dépêche señala que las autoridades locales desplegaron un operativo de búsqueda, pero no obtuvieron resultados en las semanas siguientes. Paralelamente, la víctima comenzó a recibir hasta nueve multas en dos semanas por exceso de velocidad cometidas con su vehículo. En cada caso, debió contactar a las autoridades, argumentando su inocencia y explicando la situación especial en la que se encontraba, lo que hizo que el proceso repetitivo terminara por desgastarle.

Durante varios meses, la falta de información alimentó múltiples hipótesis sobre el destino del automóvil, como la posibilidad de que hubiese sido destruido, vendido o abandonado. Pero, el caso pareció estancarse hasta julio, cuando el coche volvió a ser localizado en las inmediaciones de un robo. Tras analizar las pruebas, las fuerzas de seguridad detuvieron a varios sujetos en el lugar y, al ser interrogados, negaron cualquier implicación en la sustracción original del vehículo en el taller.

Los interrogados apuntaron a un tercer hombre, recluido desde marzo en la prisión de Seysses. Pero no ha sido hasta el pasado 3 de septiembre, ocho meses después del incidente, que la policía pudo tyrasladar al sospechoso de 48 años desde la cárcel para ser interrogado. Durante la diligencia, el recluso admitió haber cometido el robo en el Norauto de Toulouse y relató que utilizó el coche durante un tiempo antes de ser encarcelado. Posteriormente, entregó las llaves a conocidos, quienes emplearon el vehículo para actividades delictivas.

Nueve detenidos por el robo de coches para vender por piezas en Madrid y Guadalajara (Policía Nacional)

Tras esta confesión y la recuperación del vehículo, la víctima pudo volver a tener su Nissan Juke. Por su parte, el taller Norauto presentó una demanda civil por lo ocurrido. Igualmente, el principal sospechoso permanece en prisión y será juzgado próximamente en el Tribunal Penal de Toulouse mientras continúa cumpliendo su condena.