Kate Middleton, madre entregada y fan número uno de George, Charlotte y Louis: “Nunca se pierde ningún partido de sus hijos”

La princesa de Gales es uno de los miembros de la realeza británica más querida por el pueblo. La de Chapel Row no solo se ha convertido en el símbolo de la próxima monarquía a la vez que intenta dejar una huella en la sociedad, sino que también es una madre dedicada a sus hijos. Durante la premiere del reality The Real Housewives of London el pasado 18 de agosto, la socialité Panthea Parker revelaba que Kate es una presencia constante y entusiasta en los partidos de rugby y fútbol en los que participan sus hijos.

Parker, que asistió al estreno de su programa, explicó que se cruza con la princesa con cierta frecuencia debido a que los equipos de sus hijos coinciden con los de George, Charlotte y Louis. “La veo bastantes veces porque la escuela de mi hijo juega contra la escuela del suyo. Así que juegan al rugby y al fútbol entre ellos, así que siempre estamos en su escuela o en la mía”, declaró a la revista Hello!.

Aunque la socialité británica aclaró que nunca ha mantenido una conversación directa con Kate, sí destacó su cercanía y compromiso con la vida escolar. “La veo mucho, pero no para hablar con ella, solo de lejos. Es tan elegante, tan encantadora, y nunca se pierde ningún partido de sus hijos, es realmente increíble. Y yo tampoco, si no, ¿cómo lo sé?”, añadió.

Guillermo y Kate han apostado desde hace años por una educación que combina el estudio con la actividad física. Sus tres hijos han crecido rodeados de estímulos deportivos y el matrimonio procura que todos participen en diferentes disciplinas. No es extraño ver a la familia en torneos y campeonatos, donde tanto padres como hijos disfrutan de la emoción de la competición.

El ejemplo más mediático se vivió en julio, cuando George y Charlotte acompañaron a sus padres a la final individual masculina de Wimbledon. Kate, patrona del All England Lawn Tennis and Croquet Club, aprovechó la ocasión para compartir con sus hijos la tradición de asistir al torneo londinense. Dos semanas después, Guillermo y Charlotte viajaron a Suiza para apoyar a la selección femenina de Inglaterra en la final de la Eurocopa, donde la pequeña mostró expresiones de emoción que captaron la atención de las cámaras.

En más de una ocasión, la propia Kate ha hablado de esta faceta de su vida familiar. Durante una recepción en 2023 para celebrar el triunfo del equipo británico de rugby en silla de ruedas, confesó que en su casa todos son “un poco competitivos”. Aseguró además que Louis, el menor, siente una verdadera pasión por el rugby, mientras que sus hermanos disfrutan compitiendo entre ellos en cualquier actividad al aire libre

El interés de los príncipes de Gales por el deporte no se limita a acompañar a sus hijos a las gradas. Ambos son conocidos por su propia afición a la práctica deportiva: Guillermo se ha mostrado gran seguidor del fútbol y ocupa la presidencia de la Asociación de Fútbol inglesa, mientras que Kate mantiene una estrecha relación con el tenis y el hockey desde su juventud. Este bagaje, trasladado a la crianza, ha hecho que sus hijos asocien el ejercicio físico con diversión y unión familiar.

Panthea Parker, que es madre de tres niños de edades similares a los príncipes George, Charlotte y Louis, subrayó que la coincidencia en partidos y torneos es habitual. Esto ha permitido a otros padres comprobar de primera mano la implicación de Kate en la vida escolar, un rasgo que la ha convertido en un referente entre las familias de su entorno.

La inclinación de la familia por la actividad física parece haber influido incluso en su elección residencial. Está previsto que los príncipes se muden este año a Forest Lodge, una amplia propiedad histórica situada en Windsor que, según se ha informado, cuenta con una pista de tenis dentro de sus terrenos. La nueva casa sustituirá a Adelaide Cottage, la vivienda de cinco habitaciones en la que residen desde 2022.

Con más espacio y comodidades, George, Charlotte y Louis dispondrán de un entorno ideal para seguir practicando deportes de manera cotidiana. La mudanza, que se plantea como un cambio definitivo, también está pensada para ofrecer estabilidad a largo plazo a la familia, incluso cuando el hijo de Lady Di asuma el trono tras la muerte de Carlos III.