“No he podido disfrutar de él”: la infanta Elena habla como nunca del rey Juan Carlos tras su última visita a España

No es ningún secreto que la infanta Elena es una apasionada de la tauromaquia, una afición que comparte tanto con su padre, el rey Juan Carlos, como con sus hijos, Froilán y Victoria Federica. Por eso no sorprendió a nadie que este lunes la duquesa de Lugo reapareciera públicamente en Madrid para asistir a los premios de la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia, en un acto marcado por el homenaje a Enrique Ponce y el respaldo de la infanta a esta práctica.

Su aparición ha llamado la atención no solo por su vínculo habitual con este tipo de eventos, sino también por coincidir con el cierre de la segunda visita del rey Juan Carlos a España en lo que va de año, una estancia en la que Elena no estuvo presente, a diferencia de ocasiones anteriores.

El Emérito finalizó este pasado domingo, 18 de mayo, su última visita a España, en la que regresó al que ya es su refugio, Sanxenxo. Una vez más el motivo era deportivo, pues volvió a disfrutar de las regatas. En otras ocasiones, su hija mayor ha viajado a Galicia para estar con él, acompañarlo y animarlo, esta vez no pudo ser así. La ausencia de doña Elena no pasó desapercibida, sobre todo teniendo en cuenta la cercanía que mantiene con su padre. Quien sí se desplazó hasta el municipio pontevedrés fue su hermana, la infanta Margarita.

Durante los premios, la infanta ha explicado a los medios el motivo por el cual no pudo reencontrarse con don Juan Carlos: “Yo, desgraciadamente, he estado fuera, o sea que no he podido disfrutar de mi padre, pero en el próximo futuro, seguro”, ha comentado, sin dar más detalles sobre su destino. Al ser preguntada por cómo había vivido el Emérito su paso por Galicia, ha respondido brevemente: “Sí, sí, sí, muchísimas gracias”.

Más accesible de lo habitual, la infanta Elena también ha respondido a las preguntas sobre el estado de su madre, la reina Sofía, quien en las últimas semanas ha mantenido un perfil bajo. Su ausencia en la visita oficial al Vaticano para acompañar al Papa León XIV en el inicio de su papado generó algunos comentarios, al tratarse de un acto institucional de relevancia. Sin embargo, su hija zanjó cualquier especulación con pocas palabras: “Muy bien, fenomenal”, ha dicho.

Estas declaraciones, breves pero significativas, vuelven a poner de relieve el papel discreto, a la vez que constante, que Elena de Borbón mantiene dentro del entorno familiar. Si bien permanece al margen de la agenda oficial de la Casa Real, conserva una relación estrecha con sus padres y suele ser una de las figuras más visibles en actos no institucionales.

Como en anteriores ocasiones, durante los días que ha permanecido en la localidad gallega, el rey emérito se ha alojado en la vivienda de Pedro Campo, uno de sus mejores amigos. En esta ocasión el rey no ha participado con el Bribón, que está en la serie de la Liga España de 6 de metros, pero lo ha seguido de cerca en la lancha semirrígida apodada ‘Cristina’.

Este viaje estuvo marcado por el acto de conciliación, que tuvo lugar el viernes, entre el exjefe del Estado y el expresidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla. El rey emérito no acudió y justificó su ausencia alegando que “hacía mucho” que no iba a Santander. Además, tiró de humor y dijo que en Sanxenxo “hace mejor tiempo”.