
Los monoambientes se posicionaron como una de las opciones más buscadas en el mercado inmobiliario, en particular en grandes ciudades como Buenos Aires.
Factores económicos, culturales y sociales impulsan esta tendencia, mientras que su funcionalidad y ubicación estratégica los convierten en una solución práctica para quienes priorizan la comodidad y la accesibilidad en su estilo de vida. La creciente popularidad de los monoambientes responde a una combinación de razones. En términos económicos, representan una opción accesible para inquilinos que buscan reducir gastos en alquiler, servicios y mantenimiento.
“Esto es especialmente relevante en un contexto donde los precios de los alquileres de departamentos más grandes se incrementaron considerablemente en relación con los ingresos promedio”, dijo a Infobae la arquitecta Mariana Lucángeli.
Por otro lado, los cambios en los patrones de vida urbana también favorecen esta demanda.
Jóvenes profesionales, estudiantes y parejas ven en los monoambientes una solución eficiente para vivir en zonas con alta conectividad y cercanas a lugares de trabajo, universidades o centros de entretenimiento.
Valores y tendencias
En la ciudad de Buenos Aires, barrios como Palermo, San Telmo, Caballito, Belgrano y Recoleta concentran una gran parte de la oferta de monoambientes.
De acuerdo con datos recientes, los precios de alquiler de estas unidades varían entre $250.000 (los de más de 25 metros cuadrados) y $470.000 mensuales (los de 40 m2), según su ubicación y características. P
Lucángeli añadió: “Palermo encabeza las preferencias, por su vida nocturna y su cercanía a espacios verdes como el Rosedal. San Telmo atrae a quienes valoran un entorno cultural y bohemio, mientras que Recoleta es elegida por su elegancia y su proximidad a áreas comerciales y educativas”.
Entre la oferta actual, un departamento de un ambiente ubicado en Paraguay al 5400, en Palermo, tiene un alquiler mensual de $380.000, con expensas de $80.000 y 33 m2. En este barrio, los valores para unidades más nuevas pueden llegar a $700.000 mensuales.

En Almagro, un monoambiente sobre Gascón al 500 se alquila por $320.000, con expensas de $70.000 y 38 m2. Por otro lado, en Monte Castro, un monoambiente a estrenar tiene un precio de alquiler de $320.000, con expensas de $120.000 y totaliza 45 m2.
Ventajas al elegir
Los monoambientes ofrecen beneficios significativos para quienes priorizan la funcionalidad:
- Menores costos: En comparación con departamentos más grandes, el alquiler de un monoambiente suele ser más económico. Además, los gastos en servicios como electricidad, gas y agua son más bajos.
- Facilidad de mantenimiento: “Su tamaño compacto reduce el tiempo y los recursos necesarios para la limpieza y el mantenimiento”, puntualizó Lucángeli.
- Ubicación estratégica: Varios monoambientes se encuentran en zonas céntricas, bien conectadas y con acceso a servicios y transporte público.
- Versatilidad: En el contexto actual, algunos inquilinos los utilizan no solo como hogar, sino también como espacios de trabajo temporales, adaptándose a las nuevas dinámicas laborales.
Desafíos asociados al espacio reducido
A pesar de sus ventajas, los monoambientes pueden presentar inconvenientes para ciertos perfiles de inquilinos:
- Limitaciones de espacio: La falta de metros cuadrados dificulta actividades sociales y la incorporación de muebles grandes o decoraciones complejas.
- Menor contacto con el exterior: Algunos monoambientes no cuentan con balcones ni terrazas, lo que puede generar sensación de encierro para algunas personas.
- Poca flexibilidad para cambios: La estructura compacta no siempre permite reconfiguraciones significativas del espacio.
Consejos para optimizar el espacio al máximo
La organización y el diseño son esenciales para optimizar un espacio reducido. Algunos consejos prácticos incluyen:
- Usar muebles multifuncionales, como camas con cajones o mesas con espacio de guardado.
- Incorporar estanterías altas o alacenas para maximizar el almacenamiento vertical.
- Delimitar áreas con alfombras, biombos o iluminación diferenciada.
- Elegir decoración minimalista y colores claros que amplíen visualmente el ambiente.
- Incorporar plantas pequeñas para mejorar la calidad del aire y agregar un toque natural.
¿Quiénes los eligen?
Los monoambientes son ideales para estudiantes, jóvenes profesionales y parejas que buscan independencia y funcionalidad.
Adrián Cyderboim, de Crecer Inmobiliaria, dijo: “A la hora de elegir un monoambiente principalmente se tiene en cuenta que los espacios sean funcionales, las expansiones que puedan tener, la luminosidad, y son muy valorados los edificios que tienen bajos costos fijos”.
Históricamente, los monoambientes fueron la elección preferida de estudiantes del interior y extranjeros que llegan a CABA por estudios o trabajo.
Un monoambiente de 30 m2 tiene un precio menor en comparación con un dos ambientes con más metros y un living amplio, lo que refuerza su atractivo en términos económicos.
“Estos inmuebles permiten a varias personas dar el primer paso hacia la independencia o la inversión inmobiliaria, especialmente en un contexto donde acceder a una vivienda sigue siendo un desafío”, concluyó Cyderboim.