La selección argentina de vóley, dirigida por Marcelo Méndez, enfrentó una controversia significativa durante su partido contra Japón en la segunda fecha del Grupo C de los Juegos Olímpicos París 2024. El uso del “VAR” perjudicó de manera notable a la Albiceleste, lo que derivó en una amarga derrota por 3-1. Los parciales del encuentro fueron 25-16, 25-22, 18-25 y 25-23 a favor de los nipones.

Durante el segundo set, cuando Argentina encabezaba el marcador por 20-19, hubo un incidente clave. El equipo argentino solicitó un challenge tras un ataque de Facundo Conte. En el video se pudo apreciar claramente que la pelota rozó en los dedos de un jugador japonés pero, a pesar de la evidencia proporcionada por la tecnología, el punto fue adjudicado al rival por el árbitro polaco Wojciech Maroszek.

Ese fallo desencadenó una serie de eventos desafortunados. Facundo Conte fue amonestado, y el juez exhibió una tarjeta roja por los reclamos, lo que otorgó otro punto a Japón. El set, que estaba 21-19 a favor de Argentina, terminó 21-20 para los asiáticos, cambiando la dinámica del duelo. Esto complicó enormemente el desempeño argentino en un momento determinante del desarrollo.

Luego del partido, el Heredero Conte lagrimeó ante la impotencia. Y expresó su frustración a través de las redes sociales. “Tuvimos una tarjeta amarilla y una roja por enojarnos por esta pelota. Trabajamos tres años para estar en este torneo y se supone que no tenemos que demostrar emociones cuando nos cagaron a plena vista. Sólo tragar y que el show siga. Vergüenza”, publicó en diferentes historias en su cuenta de Instagram.

También se desahogó ante los micrófonos de TyC Sports: “Hay un montón de emociones en este momento. Siento que nos arrebataron una posibilidad y eso duele. A la vez me siento orgulloso, porque a pesar de eso, fuimos y seguimos jugando, y le pusimos todo. Hubo un muy buen primer set de ellos, en realidad; nos cagaron a saques. Logramos revertir eso, jugamos un segundo set espectacular que nos arrebataron, con lo del toque y la roja. Es una locura. Sólo tenemos una chance más de darlo todo. Si el resultado nos acompaña, después puede pasar cualquier cosa”.

Marcelo Méndez, el entrenador del equipo argentino, también compartió sus reflexiones tras el enfrentamiento. “Nos mostramos agresivos, con un buen vóley. El pecado fue no poder cerrar el segundo set. Llevábamos cinco o seis puntos de ventaja... Ese fue el gran problema”, dijo Méndez en declaraciones al mismo canal. A pesar de la derrota, resaltó algunos aspectos de su equipo, que en los JJOO pasados alcanzó la medalla de bronce: “Creo que dimos la cara. Fueron de menos a más, crecieron, batallaron hasta el último punto”.

El próximo desafío para la selección argentina será enfrentarse a Alemania el viernes 2 de agosto, en la búsqueda de su primera victoria en los Juegos Olímpicos. Sin embargo, esta derrota dejó al equipo en una posición complicada para clasificarse a los cuartos de final.