Leonardo Sigali afrontó los micrófonos en medios de una crisis de vestuario en Racing Club. Mientras la dirigencia busca reemplazante de Fernando Gago en el banco de suplentes y el plantel trabaja bajo las órdenes de la dupla interina compuesta por Sebastián Grazzini y Ezequiel Videla, el capitán de la Academia salió a “poner la cara” para aclarar ciertas situaciones y rumores de cortocircuitos.

“Son momentos difíciles, pero estamos para ponerle el pecho. No nos gusta perder, se entiende el malestar y enojo de la gente. Estas dos derrotas (Independiente y Platense de local) duelen mucho. No salí antes a hablar porque entendía que no era el momento, puede ser un error mío. Por diferentes situaciones, uno se toma su tiempo y creí que hoy era el momento de salir a hablar y aclarar cualquier pregunta”, comenzó el Oso ante el periodismo tras el último entrenamiento.

En las últimas horas, trascendió que hubo diferencias entre los jugadores que llevaron a la exclusión del equipo de Agustín Almendra y Emiliano Vecchio. A eso también se refirió Sigali: “Agustín ni siquiera estaba en el vestuario el día que hicieron ese comentario, estaba en el doping. Cuando salió del vestuario, se enteró que no teníamos más entrenador. De Emiliano obviamente debo imaginar las ganas y desesperación que debe tener por jugar, pero que digan que yo o mis compañeros sacamos o ponemos a alguien del equipo... Los que no me conocen, se agarrarán de eso. Los que me conocen, saben cómo me manejo y jamás haría algo así. Estoy para aportar a este club”.

Al mismo tiempo, enfatizó: “Son situaciones que molestan en lo grupal. En el día a día en el vestuario nos manejamos lo mejor posible. Tanto yo como el resto de mis compañeros estamos más fuertes que nunca. Hay situaciones que a veces sobrepasan. Nosotros, dentro del vestuario, queremos ayudar al compañero que tenemos al lado y salir de esta situación lo antes posible”.

Cuando le preguntaron por la salida de Gago, a quien fue a abrazar cuando le convirtió un gol de visitante a San Lorenzo en señal de apoyo, expresó: “A nadie le gusta que una persona pierda el trabajo y menos de la manera que se dio. Es un entrenador que sacó el 60% de los puntos, dejó una identidad de juego que, cuando se ganaba, se reconocía y mucho. Nos dolió de la manera que se fue, pero ahora Sebastián y Ezequiel a la cabeza tienen las mismas ganas. Tratamos de salir adelante con ellos”.

Por otra parte, también se refirió a los silbidos que le dedicaron los fanáticos de Racing en el último partido contra Platense: “El hincha está en una situación donde nos exige y está muy bien. Para eso estamos, para representar al club de la mejor manera. Estamos en un club muy grande. Si me silban, por algo debe ser. Si están fastidiosos o enojados conmigo, he tomado nota. Tengo que trabajar el doble. Si queremos dar ese pasito para adelante, tenemos que trabajar todos juntos. Espero que se hayan sacado la bronca, que se hayan descargado en estos dos partidos que pasaron. Pero a partir de ahora, tenemos que ir todos juntos”.