Reportan tres militares desaparecidos en el río Magdalena tras accidente durante entrenamiento del Curso de Lanceros

En medio de un entrenamiento especializado del Curso de Lanceros, que se adelanta en el Fuerte Militar de Tolemaida, tres militares desaparecieron tras un accidente ocurrido el lunes 14 de julio, mientras realizaban una maniobra con una balsa, en aguas del río Magdalena.

Los tres oficiales fueron reportados como desaparecidos luego de que la balsa improvisada en la que se desplazaban fuera arrastrada por la fuerte corriente del afluente, volcándose en el sector conocido como Isla del Sol, en el departamento de Cundinamarca.

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Según el comunicado emitido por el Ejército Nacional, los hechos ocurrieron hacia el mediodía, cuando once alumnos del curso n.º 513 participaban en una maniobra táctica de acondicionamiento y desplazamiento fluvial. Esta prueba, que forma parte del programa de entrenamiento de Lanceros, consiste en navegar el río utilizando balsas improvisadas, simulando condiciones extremas de combate y supervivencia.

Durante la maniobra, la embarcación fue absorbida por la corriente y arrastrada hacia un planchón tipo ferri, lo que provocó su volcamiento y la caída de todos los ocupantes al agua. Ocho de los militares lograron ser rescatados por personal de seguridad del Ejército que se encontraba en la zona, y recibieron atención médica inmediata.

Sin embargo, los subtenientes Jhonatan Cortés Salamanca, Nicolás Chaparro Guillén y Elián Sebastián Beltrán Vanegas no lograron salir a flote y desde entonces permanecen desaparecidos.

Ante la emergencia, el Centro Nacional de Entrenamiento —unidad del Comando de Educación y Doctrina del Ejército Nacional— activó de inmediato los protocolos de búsqueda y rescate. Las labores se centran aguas abajo del punto donde ocurrió el accidente, con apoyo de buzos especializados de la Armada Nacional y patrullajes fluviales en profundidad.

“El Ejército Nacional continuará desplegando todos los recursos necesarios para la ubicación de nuestros alumnos y mantendrá informada a la opinión pública y a sus familias”, señaló la institución en el comunicado oficial.

Además, se confirmó que los militares contaban con los elementos de seguridad requeridos, como chalecos salvavidas, y que todos habían superado con éxito las pruebas físicas y de natación incluidas en el plan de estudios del curso.

Como parte de las acciones inmediatas, una comisión de la Inspección General del Ejército fue desplazada al sitio para realizar una evaluación detallada de los hechos y determinar las circunstancias exactas de tiempo, modo y lugar en que se presentó el accidente. Aunque el uso del río como escenario de entrenamiento es habitual en este tipo de cursos, se busca establecer si hubo fallas logísticas, cambios repentinos en las condiciones del afluente o alguna imprudencia que haya puesto en riesgo la vida de los participantes.

El Curso de Lanceros, considerado uno de los más exigentes dentro del Ejército Nacional, prepara a los oficiales para misiones de combate irregular, operaciones en selva y resistencia bajo condiciones extremas. Solo un reducido porcentaje de los aspirantes logra culminarlo, y sus estándares de exigencia han sido históricamente reconocidos por otras fuerzas armadas a nivel internacional.

Entre tanto, la prioridad sigue siendo la localización de los desaparecidos, una tarea en la que participan de forma conjunta unidades del Ejército, la Armada y organismos de socorro de la región. Las autoridades hicieron un llamado a la prudencia para no difundir información no verificada sobre el estado de los desaparecidos y garantizar que las labores de rescate se desarrollen con eficiencia y respeto por las familias.

La situación permanece en desarrollo, y el Ejército Nacional reiteró su compromiso de esclarecer los hechos y mantener a la ciudadanía informada sobre cualquier avance relevante.