
Durante la audiencia contra Elder José Arteaga, alias El Costeño, señalado como coordinador logístico del atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay el pasado 7 de junio, la Fiscalía presentó nuevos detalles sobre la eliminación de pruebas tras el ataque.
Según la investigación, los implicados se reunieron en un bar de la localidad de Santa Fe para definir acciones que les permitieran desaparecer material probatorio y dificultar la ubicación de los responsables.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel
En ese encuentro, William Fernando González recibió la orden de vender el celular de alias El Costeño por una suma mínima de 300.000 pesos. La acusada Katerine Martínez, alias Gabriela, relató que Elder retiró la tarjeta SIM, formateó el dispositivo y lo entregó a un tercero identificado como “el Hermano” para que concretara la venta.
Por otro lado, la Fiscalía detalló que el celular utilizado por el menor sicario, junto con su chaqueta y gorra roja, fue arrojado al río Bogotá. Carlos Eduardo Mora, también investigado, habría sido el encargado de deshacerse de estos objetos para borrar evidencias del atentado.

“Algunos de los celulares han sido vendidos, otro celular fue arrojado al río Bogotá, de manera que es dable pensar que estuvieran los elementos ocultos”, dijo la fiscal en la audiencia.
El menor de 15 años, conocido como “Tianz”, llegó al lugar de los hechos vestido con chaqueta oscura y gorra roja, ropa que se retiró cuando se subió a un vehículo. En las grabaciones, se le observa usando una camiseta verde en la escena.
El proceso judicial también reveló que alias El Costeño habría planificado la contratación de un menor de edad para el ataque, previendo que enfrentaría sanciones penales menos severas. La imputada “Gabriela” afirmó que la instrucción era reclutar a alguien entre 14 y 15 años, para evitar que fuera juzgado como adulto. Además, el menor habría sido engañado sobre las posibilidades que tendría para su huida luego del crimen, con la promesa de que contaba con tiempo prudente para escapar sin ser capturado.

En la audiencia judicial, se mencionó que integrantes de la organización eliminaron o vendieron celulares para evitar rastreos, y que parte de la logística se orientó a eliminar cualquier vínculo directo con los hechos.
Fiscalía revela manipulación del menor en atentado a Miguel Uribe Turbay
Durante una audiencia, el ente acusador reconstruyó la planeación y ejecución del atentado, resaltando el rol de Elder José Arteaga Hernández, alias el Costeño.
Arteaga fue descrito como miembro activo de una organización criminal, encargado de coordinar la logística y el traslado de armas para homicidios en barrios como La Estanzuela, Las Cruces y Teusaquillo. La Fiscalía detalló que el acusado se hacía pasar por barbero en el local El Muelle, en Engativá, donde fue capturado tras varias semanas escondido.

El arma usada en el ataque, una pistola Glock 9 milímetros, había sido modificada en su sistema de disparo para aumentar su letalidad, según determinó el análisis forense. Este hallazgo puso en evidencia el nivel de preparación y la intencionalidad detrás del atentado.
La Fiscalía reconstruyó la manera en que Arteaga Hernández manipuló al menor sicario. Minutos antes del ataque, mientras ambos estaban en un vehículo Spark gris, el procesado le aseguró al joven: “Tranquilo que cuando pase el hecho lo van a recoger y que no hay ningún problema, porque él tiene contactada ya la Policía y que le van a dar cinco minutos de espera para que salga”.
Esta promesa buscaba evitar que el menor no dudara antes de ejecutar el plan. Sin embargo, posteriormente alias el Costeño admitió a Katherine Martínez que este supuesto acuerdo con la Policía nunca existió y que se trataba de un engaño. El jefe de la operación consideraba incluso la posibilidad de que el joven perdiera la vida tras disparar contra el senador.
Detalles en los pagos y transferencias también hicieron parte de la investigación. La Fiscalía presentó pruebas como el pago por Nequi del servicio de moto empleado por el joven sicario en su desplazamiento a Modelia y una segunda transferencia por alimentos, también realizada mediante esta aplicación. Una empleada del establecimiento tomó una captura de pantalla del pago minutos antes del ataque, lo cual permitió identificar a Elder José Arteaga como responsable de la transacción y vincularlo directamente al caso.

Arteaga permanece actualmente en uno de los calabozos más vigilados del búnker de la Fiscalía. Las autoridades también investigan la supuesta participación de José Aldinever Sierra, alias Zarco Aldinever, considerado uno de los principales jefes militares de la disidencia de las Farc Segunda Marquetalia. De acuerdo con investigadores citados por El Tiempo, Sierra habría orquestado el atentado desde Venezuela, con el objetivo de desestabilizar el panorama político colombiano en un año electoral.
Más Noticias
EN VIVO - Medellín vs. Nacional: clásico Paisa en la fecha 2 de los cuadrangulares semifinales de la Liga BetPlay II-2025
El primero de cuatro clásicos paisas que se vivirán entre noviembre y diciembre en el fútbol colombiano comenzará a perfilar a uno de los posibles finalistas del segundo semestre de la Liga

Colombia entra en la era de los estadios modernos: así van los proyectos en El Campín, el Atanasio Girardot y el Metropolitano
Infobae consultó con las alcaldías de Medellín y Barranquilla, además del administrador del escenario en Bogotá, para conocer detalles de los planes para no solo acoger fútbol en sus plazas

Lotería de Boyacá: resultado del sábado 22 de noviembre de 2025
Cada semana se realiza un sorteo en dónde están en juego varios millones de pesos

Sobrino de Cuco Vanoy fue herido a bala en Medellín en medio de escándalo por bienes del Bloque Mineros
Mauricio Vanoy Bohórquez y su acompañante Carmen García Arias fueron trasladados al Hospital Pablo Tobón Uribe en estado delicado tras ser atacados por pistoleros en el barrio La Iguaná

Secretaría de Salud de Bogotá ordena retirar lote de Bupivacaína por presuntos efectos graves en embarazadas
Se ordenó la prohibición de su uso, distribución y administración en todos los hospitales y clínicas de la capital, mientras se investigan eventos adversos graves, incluyendo mortalidad materna y alteraciones neurológicas en pacientes expuestos


