
El ejército israelí reportó este jueves la intercepción de un drone proveniente de Yemen, después de que las sirenas de alerta se activaron en comunidades próximas a la Franja de Gaza, según comunicados oficiales. Ninguna organización se adjudicó de inmediato la autoría del dispositivo, aunque los rebeldes hutíes de Yemen, respaldados por el régimen de Irán, han lanzado múltiples ataques con misiles y drones hacia Israel desde el asalto perpetrado por los terroristas de Hamas en octubre de 2023, el cual desencadenó la guerra en Gaza.
“Tras las alertas por la infiltración de una aeronave hostil en las comunidades cercanas a la Franja de Gaza, un vehículo aéreo no tripulado lanzado desde Yemen fue interceptado con éxito por la Fuerza Aérea Israelí”, detalló un comunicado militar a través de la red social X. El suceso de este jueves sigue a la intercepción, el miércoles, de un misil también disparado desde Yemen, cuya autoría fue posteriormente reivindicada por los rebeldes hutíes.

En estos incidentes recientes no se reportaron impacto directos ni víctimas, según confirmó el servicio de emergencias Magen David Adom (MDA). Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) pidieron a la población seguir las instrucciones emitidas por el Comando del Frente Interno mientras se realizaba la revisión de los hechos.
Los hutíes yemeníes, que afirman respaldar la causa palestina, suspendieron sus ataques durante una tregua de dos meses en Gaza que concluyó en marzo, pero los reanudaron después de la reactivación de las operaciones militares israelíes en el enclave.
Como respuesta a estos ataques, Israel llevó a cabo bombardeos el domingo en la capital yemení, Saná. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, aseguró que las FDI destruyeron el palacio presidencial de los hutíes y atacaron depósitos de combustible y plantas eléctricas en la ciudad. El primer ministro, Benjamín Netanyahu, señaló que el grupo proiraní “está aprendiendo a las malas las consecuencias de sus ataques contra Israel”. Añadió: “A quien nos ataca, lo atacamos. A quienquiera que planea atacarnos, lo atacamos”.
Voceros de los rebeldes hutíes informaron que los ataques aéreos israelíes en Saná dejaron al menos dos muertos y 35 heridos. La armada israelí señaló que los bombardeos estuvieron dirigidos contra el complejo militar donde se sitúa el palacio presidencial, dos centrales eléctricas y un almacén de combustible.
El viernes pasado, los hutíes lanzaron un ataque contra Israel utilizando un drone y un misil balístico con una ojiva de bomba de racimo. De acuerdo con información militar israelí, uno de los proyectiles impactó el patio de una vivienda en la ciudad central de Ginaton, causando daños menores. Las autoridades israelíes están investigando por qué el proyectil no fue interceptado correctamente y han indicado que la falla no está relacionada con el tipo de ojiva utilizada.
Este nuevo ciclo de hostilidades marca una escalada en la confrontación entre Israel y los hutíes, involucrando a infraestructuras clave en Yemen y sistemas de defensa aérea en territorio israelí.