
En las remotas Islas Chatham, ubicadas al este de Nueva Zelanda, un hallazgo inesperado iluminó aspectos cruciales de la historia marítima polinesia. Vincent y Nikau Dix, descubrieron los restos de una antigua canoa polinesia, conocida como waka, mientras recorrían la costa después de una tormenta.
Smithsonian Magazine subraya que, este descubrimiento no solo abre una ventana hacia las técnicas de navegación de los primeros habitantes de la región, sino que también proporciona una visión más profunda sobre las habilidades de los navegantes que surcaron el extenso Pacífico hace miles de años.
El descubrimineyo de la canoa waka
Según relató Vincent Dix, su hijo vio unos trozos de madera en el arroyo y, al inspeccionarlos, notaron que tenían extraños agujeros y estaban sorprendentemente bien conservados.
Al principio pensaron que se trataba de madera para su uso personal, pero al reunir las piezas, se dieron cuenta de que estaban comenzando a tomar la forma de una canoa. Este hallazgo fue el primer indicio de que habían encontrado algo mucho más significativo.

Un hallazgo significativo para la arqueología
El waka descubierto en las Islas Chatham fue considerado por los expertos como uno de los hallazgos más importantes en la historia de la arqueología polinesia. Justin Maxwell, el arqueólogo que lidera la investigación, detalló que este descubrimiento ofrece una perspectiva única sobre la tecnología de las canoas polinesias.
Según Maxwell, “no importa cuán viejo sea, no podemos exagerar lo increíble que es” este hallazgo, y aseguró que se considerará uno de los más importantes de todos los tiempos en la región polinesia.
El waka no fue tallado a partir de un solo árbol, como es común en otras canoas de la región, fue creado a partir de cientos de piezas de madera cuidadosamente trabajadas. Maxwell explicó que el hallazgo de cuerdas, velas, y otros elementos que normalmente se habrían perdido con el paso del tiempo, “voló completamente las mentes de todos“.
Smithsonian Magazine destaca que, este hallazgo además de ofrecer una visión sobre la construcción de canoas, al mismo tiempo lo hace sobre las complejas técnicas de navegación utilizadas por los primeros habitantes de las islas polinesias.

Conexión con los Moriori
Los expertos sugieren que esta canoa pertenece probablemente a los Moriori, el primer pueblo indígena que llegó a las Islas Chatham alrededor del año 1500, tras navegar desde Nueva Zelanda.
Maui Solomon, activista de derechos indígenas y presidente del Moriori Imi Settlement Trust, indicó que el diseño de la canoa se alinea con las descripciones de la historia oral de los Moriori.
Según Solomon, las muescas y las largas manijas de la canoa son características de las canoas tradicionales más pequeñas utilizadas por este pueblo.

Conservación y estudios en curso
A medida que los investigadores continúan con el trabajo de conservación, más de 450 piezas de la canoa fueron recuperadas. Según la conservadora Sara Gainsford, su equipo estableció un laboratorio cerca del sitio de la excavación para poder preservar estos valiosos fragmentos.
A pesar de que aún no se determinó la antigüedad exacta del waka, los estudios continúan y se espera que pronto se disponga de más información sobre el origen y la historia de esta canoa ancestral.
Smithsonian Magazine concluye afirmando que, este descubrimiento no solo evidencia la importancia histórica de las Islas Chatham como punto de encuentro de culturas ancestrales, sino que además marca un hito en la arqueología oceánica. Abriendo de esta manera nuevas perspectivas sobre los pueblos polinesios y sus técnicas de navegación que, con el paso de los siglos, siguen siendo fundamentales para comprender la historia de la humanidad en la región del Pacífico.