El vídeo grabado por el rey emérito Juan Carlos I, difundido entre la juventud española y solicitando apoyo para el reinado de Felipe VI, ha sido calificado por la Casa Real como una actuación "inoportuna e innecesaria". Según publicó el medio, la reacción desde Zarzuela ha sido de malestar, ya que la institución no había sido informada previamente sobre la existencia de la grabación, que se conoció este lunes poco después de las diez de la mañana y que se produce a solo dos días del lanzamiento de las memorias del exmonarca, tituladas ‘Reconciliación’.
La aparición de este vídeo, que en un primer momento generó confusión respecto a su autenticidad al circular la hipótesis de un montaje realizado con inteligencia artificial, marca la primera vez que Juan Carlos I se dirige públicamente a los españoles desde su abdicación en 2014 y su posterior traslado a Emiratos Árabes Unidos en el verano de 2020. Según informó el medio, la grabación tiene una duración de poco menos de un minuto y medio, presenta al emérito ante una bandera de España ondeando y se dirige principalmente a la población joven.
En el texto del mensaje, Juan Carlos I justifica la decisión de publicar sus memorias coincidiendo con el 50º aniversario de su proclamación y recalca la importancia de que las nuevas generaciones accedan a una visión de la historia de España "sin distorsiones interesadas", articulando su petición en estos términos: "Quiero que sepáis que vuestros padres, vuestros abuelos y muchos españoles unidos conseguimos hacer una Transición ejemplar, dar un cambio a este país en unas circunstancias muy complejas en las que todos tuvimos que esforzarnos y arriesgar, pero con la generosidad y el esfuerzo de todos logramos que este país sea lo que hoy es".
El medio detalló que, en su intervención, el exmonarca no solo reivindicó su legado y el papel de la monarquía durante la Transición democrática, sino que también expresó el deseo de que los jóvenes apoyen la labor de Felipe VI al frente de la institución. El emérito subrayó que la monarquía desempeñó una función "esencial" estableciendo vínculos institucionales y relaciones internacionales que facilitaron la conexión de España con otros países.
La petición explícita se dirigió a los jóvenes: "Os pido que apoyéis a mi hijo el Rey Felipe en este duro trabajo que es unir a todos los españoles y que España siga siendo y jugando un papel tan relevante en el mundo". El vídeo concluyó con un agradecimiento y una despedida: "Gracias por escucharme, un fuerte abrazo".
Según consignó el medio, Zarzuela rara vez emite comentarios sobre las actuaciones públicas de Juan Carlos I, evitando hacerlo incluso tras la publicación de su obra en Francia o después de sus entrevistas concedidas recientemente a medios internacionales. No obstante, en esta ocasión, la Casa Real sí ha reconocido el desagrado interno causado por el vídeo, trasladando que no considera "oportuna ni necesaria" la iniciativa personal del exjefe del Estado.
La coincidencia temporal de la grabación se ha interpretado como un movimiento directamente relacionado con la próxima llegada a las librerías españolas de ‘Reconciliación’, las memorias donde Juan Carlos I ofrece su versión sobre cinco décadas de trayectoria pública, incluyendo la transición democrática y sus reflexiones sobre el presente institucional. Según publicó el medio, este contexto ha sido considerado relevante a la hora de analizar tanto el contenido del mensaje como su repercusión en la escena política y mediática nacional.
La iniciativa de Juan Carlos I, que pone el foco en el legado de la Transición y solicita apoyo explícito a su hijo en la jefatura del Estado, se ha producido en un momento en que la monarquía afronta retos en la esfera pública y enfrenta debates sobre su papel actual. Según destacó el medio, el propio emérito enmarca su mensaje en la intención de ofrecer a las generaciones más jóvenes la posibilidad de conocer la historia reciente de España a través de la experiencia de sus protagonistas directos, reiterando que la memoria histórica resulta clave en la comprensión del presente y futuro del país.
Las reacciones al vídeo y a la postura expresada por Zarzuela muestran la complejidad de la relación entre la actual Casa Real y la figura del exmonarca. A la espera de la publicación oficial de las memorias, el debate sobre la oportunidad y el impacto de este tipo de intervenciones personales añade un nuevo elemento a la conversación pública en torno a la familia real española, tal como reportó el medio.
