
El parque inmobiliario español comprende cerca de nueve millones de edificios residenciales, que suman alrededor de 26 millones de viviendas, junto con unos 370.000 inmuebles del sector terciario. Este conjunto de construcciones representa aproximadamente el 40% de las emisiones contaminantes a nivel global, convirtiéndolo en un área decisiva para la descarbonización del país. El Gobierno ha situado la mejora de la eficiencia energética y la reducción del impacto ambiental asociado a los inmuebles en el centro de su política, a través de un plan nacional que movilizará 39.350 millones de euros hacia 2030 para impulsar la rehabilitación de edificios, según informó Europa Press.
El Ministerio de Vivienda ha diseñado el Plan Nacional de Renovación de Edificios, que prevé la rehabilitación profunda de 1,5 millones de viviendas en todo el país entre los años 2020 y 2030, superando así la meta establecida en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), fijada en 1,3 millones para ese mismo periodo. La cifra supone una media superior a 137.000 intervenciones anuales y contempla tanto actuaciones profundas como medias y ligeras, siempre que estas últimas tengan impacto directo en la reducción del consumo energético. De acuerdo con la información citada por Europa Press, el nuevo plan será la herramienta estratégica básica para orientar el sector inmobiliario español hacia las cero emisiones antes de 2050, en línea con la normativa europea sobre Eficiencia Energética de Edificios (EPBD).
La normativa comunitaria obliga a todos los Estados miembro a recortar el consumo energético de los inmuebles un 16% antes de 2030 y un 20% antes de 2033, estableciendo el objetivo de neutralidad climática para 2050. El plan español aplica el objetivo de reducción del consumo energético al conjunto del parque residencial, en vez de concentrarse únicamente en los edificios menos eficientes, e incorpora acciones específicas para el sector terciario. En este ámbito, que engloba oficinas, comercios y otros espacios no residenciales, la directiva europea exige que el 16% de los inmuebles menos eficientes se rehabilite antes de 2030, y eleva la exigencia al 26% para 2033. Fuentes ministeriales citadas por Europa Press destacaron que el Ministerio de Vivienda trabaja en la identificación precisa de estos edificios, considerando que su transformación resulta determinante en el avance hacia la neutralidad climática.
Europa Press detalló que la estrategia nacional se articula sobre el programa Arquitectura Cero Emisiones (ARCE 2050) y un nuevo Código Técnico de la Edificación, dos iniciativas orientadas a asegurar la calidad arquitectónica y ampliar el acceso de los ciudadanos a viviendas sostenibles. Además, persiguen adaptar el parque inmobiliario a los compromisos y obligaciones que impone Bruselas en materia energética y de emisiones contaminantes.
El presupuesto estimado para llevar a cabo el Plan Nacional de Renovación de Edificios asciende a 39.350 millones de euros a desembolsar hasta 2030, según cifras del Ministerio de Vivienda obtenidas por Europa Press. De ese total, un 29% provendrá de recursos públicos, es decir, aproximadamente 11.300 millones de euros. Están incluidos fondos del Plan Estatal de Vivienda 2026-2030, que destinará cerca de 2.000 millones de euros ―el 30% de su presupuesto― para la rehabilitación de edificios. El Ministerio de Vivienda contará así con un soporte añadido de cerca de 3.000 millones de euros procedentes del Plan Social para el Clima de la Comisión Europea, dirigidos expresamente a intervenciones en vivienda y transición energética. El resto de los recursos se completará mediante otras líneas presupuestarias públicas y aportaciones del sector privado, para alcanzar el monto global delineado en el plan.
Entre los efectos proyectados, el Ministerio de Vivienda ha señalado que la implantación del plan está diseñada para combatir la pobreza energética y reducir los costes de energía doméstica, mejorar la salud pública por la disminución de la contaminación, dinamizar el sector productivo y promover la creación de empleo. De acuerdo con los cálculos oficiales detallados por Europa Press, el Ejecutivo estima que se generarán cerca de 500.000 empleos directos e indirectos en España durante el periodo comprendido entre 2023 y 2030, resultado de las inversiones en rehabilitación y del impulso de actividades vinculadas a la eficiencia energética.
Información difundida por Europa Press indica que España experimentó en 2023 una reducción del 10% en el consumo energético residencial en comparación con 2020, lo que la acerca al cumplimiento del objetivo de ahorro del 16% plasmado en la estrategia nacional para 2030. Los datos oficiales predicen una caída del consumo residencial del 25% para 2030, valor que incluso supera el mínimo exigido por la Comisión Europea. Las estimaciones para 2035 prevén un descenso del 33% sobre los registros de 2020, situándose por encima del 20% requerido a escala comunitaria. Se prevé que, después de 2033, la Comisión Europea permita mayor flexibilidad a los Estados miembro para determinar los porcentajes de reducción, siempre con la meta de alcanzar el consumo nulo en 2050.
La situación actual del parque de edificios evidencia márgenes de mejora, ya que en 2020 el consumo energético medio alcanzó los 51,2 kilovatios hora por metro cuadrado al año. El objetivo gubernamental ubica la meta para 2050 en 22 kilovatios hora por metro cuadrado al año, lo que implica un cambio sustancial tanto en el comportamiento de los usuarios como en el desempeño energético de los edificios. La valoración de los resultados de las políticas públicas no dependerá únicamente del volumen de energía ahorrada, sino también del número de edificios sometidos a rehabilitaciones profundas. Aunque la directiva europea no impone cifras exactas, sí exige implementar registros energéticos y sistemas de seguimiento que permitan evaluar el impacto real de las intervenciones, detalló Europa Press.
El PNIEC propuso como meta la rehabilitación profunda de 1,3 millones de viviendas para el periodo que abarca de 2020 a 2030, lo que supone 137.000 viviendas al año. El Ministerio de Vivienda aspira a superar esa cifra y alcanzar 1,5 millones de rehabilitaciones profundas, incluyendo en el cómputo intervenciones medias y ligeras que logren mejoras sustanciales en la eficiencia energética, de acuerdo con lo informado por Europa Press. En la actualidad, España registra una media de 540.000 rehabilitaciones anuales: de ese total, 31.500 corresponden a obras con visado ―consideradas profundas― y 508.500 a intervenciones de menor envergadura. La Comisión Europea exige que las actuaciones realmente sirvan de palanca en el ahorro energético, pero permite incluir en los objetivos nacionales intervenciones medias y ligeras cuando generen beneficios demostrables.
El borrador del Plan Nacional de Renovación de Edificios integra siete ejes estratégicos y plantea 57 medidas concretas, además de más de 200 actuaciones, según datos obtenidos por Europa Press. Los focos de intervención abarcan desde la rehabilitación energética y la regeneración urbana hasta la creación de barrios sostenibles y la mitigación de la pobreza energética. También se prioriza la innovación, la economía circular, la industrialización de la construcción, la promoción de energías renovables, la mejora de la gobernanza y el financiamiento, así como acciones dirigidas a la sensibilización y capacitación ciudadana.
El desarrollo del plan seguirá una hoja de ruta definida. De acuerdo con la información brindada por Europa Press, el Ministerio de Vivienda someterá el borrador a consulta pública y enviará el documento a la Comisión Europea antes de que finalice 2024, paso que permitirá recabar observaciones y recomendaciones por parte de Bruselas, que dispondrá de medio año para plantear ajustes. El Ejecutivo español tendrá plazo hasta el 31 de diciembre de 2026 para ratificar la versión definitiva del plan, que será validada por el Consejo de Ministros. Tras su aprobación, la Comisión Europea evaluará en 2030 el avance de España, exigiendo información verificable sobre el consumo energético y los progresos registrados en las distintas líneas de acción.
La planificación desarrollada y el volumen de recursos movilizados buscan transformar el parque inmobiliario nacional en una referencia de sostenibilidad y eficiencia energética, tal como exigen los reglamentos europeos y los objetivos de reducción de emisiones asumidos por España. Según el balance realizado por Europa Press, el éxito de este plan dependerá tanto del grado de ahorro energético conseguido como de la cantidad y calidad de los procesos de rehabilitación implementados en el parque inmobiliario.

