Eduardo Esteban Pinillos, jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial, explicó que el sospechoso no negó su implicación tras ser arrestado por la Policía Nacional en relación con la explosión ocurrida en un edificio ubicado en el número 37 de la calle Pérez Galdos en Logroño. Este incidente, que ocurrió el 14 de octubre de este año, fue resultado de una supuesta tentativa de homicidio que tenía como objetivo a un residente del piso superior. Según detalló el medio, los informes oficiales atribuyen los hechos a un conflicto previo entre el detenido, un hombre de 47 años y nacionalidad colombiana, y su vecino.
Según publicó la fuente, la operación que condujo al arresto del presunto responsable fue presentada ante los medios por la delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz Nalda, el jefe superior de Policía, Manuel Laguna Cencerrado, y el propio jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial, Eduardo Esteban Pinillos. Los portavoces oficiales ofrecieron la información sobre la detención vinculándola de manera directa a la investigación de la explosión de gas butano y calificaron los hechos como una tentativa de homicidio. El sospechoso, al momento de su arresto, no presentó resistencia ni ocultó su participación en los hechos que se le imputan, aspecto destacado por los responsables policiales ante los medios de comunicación.
El medio detalló que la explosión se registró en el sexto piso, concretamente en el apartamento 6ºC, del edificio situado en Pérez Galdos, manifestándose una clara intencionalidad de causar daño a la persona que residía en el piso superior. Las indagaciones iniciales indicaron que el principal móvil estaría relacionado con problemas de convivencia entre el detenido y su vecino, lo que habría motivado al presunto autor a recurrir a este acto extremo.
De acuerdo a la información brindada por la Policía Nacional y difundida por la fuente, las autoridades actuaron tras recopilar elementos probatorios que apuntaban a la responsabilidad del sospechoso en la manipulación y liberación de gas butano con el fin de provocar la explosión que pondría en riesgo la vida de su vecino. Los equipos de emergencia intervinieron en la escena tras reportarse el incidente, permitiéndoles identificar indicios relevantes para la investigación que más tarde sería expuesta por las autoridades en la comparecencia oficial.
La delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz Nalda, participó en la presentación de la operación, subrayando la coordinación entre las distintas brigadas policiales involucradas en el esclarecimiento del caso. Manuel Laguna Cencerrado, jefe superior de Policía, respaldó el trabajo de su equipo y destacó la celeridad en la detención del presunto autor, quien fue puesto a disposición judicial bajo la acusación de tentativa de homicidio.
El proceso de investigación, consignó el medio, se basó en testimonios de los vecinos, así como en evidencias físicas recabadas en el lugar de la explosión. Los reportes preliminares señalaron que la liberación de gas respondió a una acción premeditada, orientada específicamente a afectar la integridad del vecino del piso superior, dando relevancia al trasfondo de disputas personales como elemento central del caso.
La explosión, según la información difundida, no solo ocasionó daños materiales considerables en el edificio sino que también generó preocupación entre los residentes y motivó la intervención de los equipos de emergencia para garantizar la seguridad de todos los habitantes del inmueble. Las autoridades policiales llevaron adelante la investigación bajo la premisa de que la acción buscaba causar lesiones letales, dada la naturaleza del material empleado y las circunstancias en las que se produjo el incidente.
Además, el medio informó que el arresto del presunto implicado se realizó poco después de la explosión, en el marco de una operación que se mantuvo bajo reserva hasta contar con los indicios necesarios para presentar cargos por tentativa de homicidio. Las autoridades confirmaron que el proceso judicial continuará en los tribunales competentes, mientras se aguarda la evolución legal del caso y nuevas ampliaciones de información sobre el desarrollo de la investigación.
Los hechos, según consignó la fuente, han tenido una repercusión importante en la comunidad local, dada la gravedad de la acusación y el temor generado tras el suceso. Las autoridades reiteraron su compromiso con la seguridad vecinal e insistieron en la importancia de la colaboración ciudadana como una de las claves para el esclarecimiento de este tipo de delitos.
