
“Hace ya más de un año y medio que Verónica y yo tomamos caminos distintos, y hoy puedo decir con serenidad que estamos oficialmente divorciados”. Con estas palabras, Pitingo quiso trasladar claridad sobre el final de su relación sentimental con Verónica Fernández y sobre cómo afronta su nueva etapa personal. El artista andaluz se pronunció en su cuenta de Instagram, según informó la prensa especializada, en respuesta a las diversas especulaciones que han circulado en las últimas semanas acerca de su vida privada y la naturaleza de su vínculo con Laura, su actual pareja.
Tal como publicó el medio, Pitingo declaró que la decisión de separarse de Verónica Fernández se tomó hace ya más de dieciocho meses, dejando atrás cualquier tipo de incertidumbre o comentario infundado sobre las circunstancias de la ruptura. “Ella es y será siempre la madre de lo más hermoso que me ha dado la vida: nuestro hijo Manuel. Por eso solo puedo tener hacia ella respeto y gratitud”, expresó el cantante, cuyo mensaje buscó reafirmar la relación de respeto y afecto que mantiene hacia la madre de su hijo. Pitingo subrayó que el bienestar de su hijo Manuel está en el centro de sus prioridades, asegurando que existe entre madre e hijo un vínculo irrompible: “Manuel ama profundamente a su madre, la quiere con toda su alma y la lleva siempre en su corazón. Entre ellos existe un vínculo precioso que nada ni nadie podrá romper, y eso me alegra cada día”, compartió en la red social.
Según detalló Pitingo en la publicación recogida por los medios, la aparición de Laura en su vida no tuvo relación con el final de su matrimonio con Verónica Fernández. El artista explicó que Laura era su “primer amor”, a quien conoció hace más de treinta años, y señaló que la relación sentimental con ella comenzó solo después de que ambos hubieran rehecho sus vidas por separado. Sobre este punto, Pitingo enfatizó: “Quiero dejarlo claro: ella no fue el motivo de mi separación. Nuestra relación comenzó mucho tiempo después, cuando ambos ya habíamos rehecho nuestras vidas por caminos distintos”.
En sus declaraciones, el músico quiso poner fin a las noticias que sugerían la posibilidad de una infidelidad o la existencia de terceras personas como origen de la ruptura con Verónica Fernández. “No ha habido terceras personas, ni historias turbias, solo el paso del tiempo, la vida y sus caminos”, afirmó Pitingo, según publicó la prensa. El cantante redobló el pedido de respeto y comprensión para con su situación familiar, y señaló que lo más importante actualmente es la felicidad de su hijo: “Hoy solo pido comprensión, cariño y respeto, porque lo importante es que mi hijo crezca feliz, sabiendo que está rodeado de amor por todas partes”, apuntó en Instagram.
El medio agregó que el artista afronta una nueva etapa vital junto a Laura, de quien destacó sus cualidades personales: “Una mujer buena, serena, con un corazón enorme, que ha sabido darme calma, alegría y mucha verdad”, aseguró Pitingo, según consignaron fuentes periodísticas. El andaluz insistió en que la felicidad que siente hoy se debe a que la vida ha propiciado una “nueva etapa” sentimental alejada de las causas de la separación con la madre de su hijo. Al respecto, manifestó que se siente agradecido por la oportunidad de vivir un nuevo comienzo y por el apoyo recibido tanto de sus seres queridos como de sus seguidores.
Por medio de su mensaje, Pitingo también afirmó su intención de cerrar definitivamente cualquier rumor o información mal intencionada sobre su separación y sobre el papel de Laura en su situación personal actual. “La vida sigue, y yo sigo con ella trabajando, soñando y dando gracias por cada amanecer. Porque al final, lo único que cuenta es haber vivido con amor y con verdad”, concluyó el artista en su perfil, según recogió la prensa.
En este contexto, el cantante solicitó que se respete la privacidad de su familia y enfatizó el valor de mantener una relación cordial con Verónica Fernández, no solo por la historia compartida, sino especialmente por el bienestar de su hijo Manuel. La intervención pública de Pitingo busca zanjar el debate en torno a su vida sentimental y priorizar el clima de armonía familiar por encima de las especulaciones mediáticas.


