EEUU mata a catorce "narcoterroristas" en ataques contra cuatro lanchas en aguas internacionales en el Pacífico

El Pentágono informa que una serie de bombardeos coordinados, ordenados por Donald Trump, dejó catorce fallecidos y un sobreviviente tras el impacto letal contra embarcaciones ligadas al narcotráfico internacional en el Pacífico, según fuentes oficiales

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El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, indicó que México asumió la coordinación del rescate de la única persona sobreviviente tras una serie de bombardeos ejecutados contra embarcaciones sospechosas en el Pacífico oriental. Según reportó el medio fuente, estos ataques fueron ordenados por el presidente Donald Trump y dejaron un saldo de catorce personas fallecidas. El Pentágono comunicó que la operación tuvo lugar el lunes en aguas internacionales y que las embarcaciones implicadas estaban asociadas a organizaciones catalogadas como terroristas y relacionadas con el tráfico internacional de narcóticos.

Tal como informó la fuente, Hegseth publicó un mensaje en la red social X donde detalló que el Ejército estadounidense lanzó “ataques letales y cinéticos” contra cuatro embarcaciones detectadas por los servicios de inteligencia de Washington. El Pentágono identificó que todas transitaban rutas conocidas de tráfico de drogas, transportaban estupefacientes y eran operadas por grupos señalados como narcoterroristas en la región del Pacífico oriental. El funcionario no precisó las coordenadas exactas de los operativos, pero recalcó que tuvieron lugar fuera de las aguas territoriales, en jurisdicción internacional.

De acuerdo con la información proporcionada, en el primero de los bombardeos resultaron alcanzadas embarcaciones donde viajaban ocho personas. El segundo ataque afectó a otra nave con cuatro personas a bordo, mientras que el tercero tuvo como objetivo una embarcación con tres tripulantes. En total, catorce fallecieron y solo una persona permaneció con vida. Hegseth afirmó que no se registraron daños ni bajas en las fuerzas estadounidenses involucradas y enfatizó la ausencia de otras consecuencias materiales o humanas para el personal del Pentágono.

El secretario de Defensa también destacó que la intervención contó con colaboración de las autoridades mexicanas, quienes asumieron la tarea de coordinar las acciones inmediatas para el rescate del superviviente. Hasta este momento no se han divulgado detalles adicionales sobre el estado de la persona hallada con vida ni cuál será su destino tras el rescate, ni tampoco si las identidades de los fallecidos han sido consignadas formalmente o si se abrirán canales formales para su repatriación.

En sus declaraciones, replicadas por el medio fuente, Hegseth recordó que el Departamento de Estado de Estados Unidos lleva dos décadas centrando esfuerzos en la protección de países aliados y subrayó que, bajo la actual administración, la defensa de territorio estadounidense constituye una prioridad directa. El secretario calificó a los narcotraficantes atacados como responsables de más muertes de ciudadanos estadounidenses que Al Qaeda, anticipando un cambio de enfoque y tono en la manera en que Washington enfrentará estos hechos. "Les localizaremos, les ubicaremos y después les cazaremos y mataremos", expresó el secretario según publicó el medio fuente.

El Pentágono expuso que sus agencias de inteligencia habían identificado previamente a las embarcaciones semanas antes de la operación militar y que las naves venían siendo vigiladas por su implicación en actividades ilícitas. El señalamiento explícito de rutas de narcotráfico en el Pacífico oriental sugiere un despliegue de recursos y monitoreo coordinado entre varias ramas del aparato de inteligencia y defensa de Estados Unidos, aunque la información difundida no detalla la colaboración específica con otras agencias ni con gobiernos de la región, más allá de la referencia a la intervención mexicana tras los ataques.

El reporte enfatiza que el operativo se enmarca en la estrategia de enfrentamiento directo al tráfico de drogas y a las organizaciones criminales que, según la evaluación estadounidense, representan una amenaza comparable al terrorismo internacional. Al insistir en la cifra de muertes atribuidas a estos grupos, Hegseth instó a público y autoridades a considerar la magnitud del fenómeno del narcotráfico regional, poniendo en primer plano el impacto sobre la seguridad nacional de Estados Unidos.

La operación, autorizada directamente por el presidente Trump según consignó la fuente, refuerza la intención de Washington de utilizar fuerza letal para evitar el flujo de narcóticos hacia su territorio, incluyendo el despliegue de capacidades militares fuera de las aguas jurisdiccionales nacionales. La información disponible no especifica si esta operación forma parte de una nueva campaña regional sostenida, ni ofrece detalles sobre previsiones diplomáticas respecto a posibles reacciones de terceros países afectados por el incremento de presencia militar estadounidense en aguas internacionales del Pacífico.