
Durante la rueda de prensa junto al canciller federal alemán, Friedrich Merz, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, planteó la urgencia de alcanzar un acuerdo político para poner fin al sufrimiento en Gaza, en contexto del debate sobre la respuesta militar de Israel tras el atentado de Hamás del 7 de octubre de 2023. En ese marco, Sánchez sostuvo que la estrategia del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, resulta “profundamente equivocada”, ya que, en su opinión, no genera seguridad para los israelíes, incrementa el aislamiento de Israel y provoca un deterioro general de la estabilidad en Oriente Medio, según recogió Europa Press.
Durante su intervención, Sánchez explicó que la experiencia de España en materia de violencia terrorista, por los ataques de ETA y por el atentado del 11 de marzo de 2004 en Madrid, llevó al país a la convicción de que el terrorismo no se combate mediante ataques indiscriminados hacia civiles. Según consignó Europa Press, Sánchez aseguró: “El terrorismo no se vence con un ataque indiscriminado sobre civiles”. Ese análisis lo extendió a la ofensiva israelí en Gaza, indicando que ha causado más de 60.000 muertos, y argumentó que esta táctica, lejos de debilitar a Hamás, produce más inseguridad tanto para Israel como para la región.
Sánchez reiteró su condena al ataque perpetrado por Hamás y exigió la liberación de todos los rehenes que el grupo aún mantiene en su poder. Al mismo tiempo, destacó la amistad histórica entre el pueblo español y el pueblo israelí, aunque insistió en que “sabemos cómo vencer al terrorismo” y que el modelo que aplica actualmente Israel resulta contraproducente. De acuerdo con Europa Press, el mandatario español afirmó que la política de ataques masivos, además de causar un elevado número de víctimas civiles, está conduciendo a una mayor inestabilidad regional.
Respecto al debate generado en España sobre si la ofensiva israelí en Gaza puede calificarse como genocidio, Sánchez subrayó que en su encuentro con Merz ambos se enfocaron en exponer sus posturas, sin centrarse en la denominación jurídica de esos hechos. Según publicó Europa Press, Sánchez recalcó la coincidencia de ambos gobiernos en los objetivos centrales: lograr una coexistencia pacífica entre israelíes y palestinos, poner fin a la violencia, abrir un horizonte político para establecer la estabilidad en Oriente Medio y asegurar el ingreso de la ayuda humanitaria.
Por su parte, el canciller alemán expuso algunos matices en la posición germana. Friedrich Merz coincidió con la crítica española sobre la desproporción de la respuesta israelí, señalando que no comparte la visión del Gobierno israelí respecto a la posibilidad de erradicar a Hamás mediante la estrategia militar empleada hasta ahora. Según detalló Europa Press, Merz afirmó: “No compartimos la opinión del Gobierno israelí de que de esta manera puede alcanzar su objetivo de eliminar a Hamás de forma duradera”. Además, el canciller sostuvo que Hamás podría detener la guerra si pusiera fin a la violencia y liberara a los rehenes “en cuestión de horas”.
Europa Press recopiló también el posicionamiento alemán respecto al reconocimiento de Palestina. Merz reiteró que Alemania no prevé dar ese paso, a diferencia de España, Francia, Reino Unido y otros países europeos que han manifestado en los últimos meses la intención de avanzar en ese reconocimiento. El canciller explicó que, dada la historia alemana, su país considera que el reconocimiento debe producirse sólo como el cierre de un proceso hacia la solución de dos estados, y reafirmó el respaldo de Berlín al Estado de Israel, aunque subrayó que eso no implica un apoyo incondicional a todas las decisiones del Gobierno israelí. En sus palabras recogidas por Europa Press, Merz defendió que “debe ser posible criticar la política del Gobierno israelí, pero nunca debe convertirse en algo que se utilice para incitar al odio contra judías y judíos”, punto en el que aseguró coincidir con el Gobierno español.
La preocupación conjunta por la situación humanitaria en Gaza y por la ofensiva terrestre de las Fuerzas Armadas israelíes en la ciudad motivó también referencias a Cisjordania. El canciller alemán apuntó el temor a que se produzcan medidas que puedan interpretarse como pasos hacia la anexión, lo que dificultaría aún más la viabilidad de la solución de los dos estados. Merz indicó que, desde su posición, tanto Berlín como Madrid consideran esencial que esa solución se mantenga como una alternativa real.
En cuanto a las acciones diplomáticas y sancionadoras, la divergencia se ha dejado sentir en el seno de la Unión Europea. Según relató Europa Press, Sánchez defendió la suspensión total del Acuerdo de Asociación UE-Israel como represalia por la campaña militar israelí, opción preferida por el Gobierno español frente a la suspensión parcial sugerida por Bruselas. Mientras tanto, Alemania no ha confirmado si respaldará la medida, ya que, según Merz, el Ejecutivo germano aún no ha tomado una decisión al respecto.
El encuentro entre Sánchez y Merz se enmarca en un contexto de intensos debates dentro de la Unión Europea sobre cómo reaccionar diplomática y humanitariamente ante el conflicto entre Israel y Hamás. Ambos dirigentes resaltaron la importancia de la ayuda humanitaria y el trabajo conjunto para reducir las tensiones en la región, aunque mantuvieron diferencias sobre el enfoque y las herramientas políticas y diplomáticas a emplear. Europa Press destacó la voluntad de ambos gobiernos de mantener canales de diálogo abiertos tanto entre sí como dentro del marco europeo, pese a las discrepancias sobre cuestiones como el reconocimiento del Estado palestino o las sanciones a Israel.
Europa Press difundió imágenes del encuentro y la rueda de prensa, subrayando que la comparecencia conjunto de ambos líderes visibiliza las tensiones y matices existentes en la gestión europea del conflicto. Sánchez reiteró el rechazo español al actual enfoque israelí, mientras Merz buscó equilibrar el respaldo histórico alemán a Israel con las críticas hacia determinadas tácticas militares y las preocupaciones sobre los derechos humanos en Gaza y Cisjordania.

